Muchas parejas, al ser padres por primera vez se encuentran con un montón de situaciones para las que no estaban del todo preparados. La alegría de un embarazo, la ilusión y las ganas hacen que poca gente te diga lo que sucede en realidad cuando por fin llega el bebé.
Un grupo de padres y madres fueron grabados en vídeo para que explicaran a los futuros padres aquello que les hubiera gustado oír antes de tener el bebé y este vídeo es el resultado de ello: diez consejos para padres primerizos.
Antes de nada, mirad el vídeo
Antes de seguir leyendo, mirad el vídeo y escuchad los consejos.
Bien, supongo que ahora estaréis un poco emocionados porque estos padres demuestran que en realidad, aunque ser padres ha resultado ser más duro de lo que esperaban, se sienten felices, dichosos y agradecidos.
En realidad, el último consejo es el mejor de todos porque en realidad todo radica en el amor, en prepararte para quererle mucho y en tener claro que vais a sentir muchas emociones diversas, a veces contrapuestas. De todas maneras, vamos a hacer un repaso de todo ello a continuación.
Algo sobre esos diez consejos
El primer consejo que dan es el de tener claro que hagas lo que hagas, alguien pensará que lo estás haciendo mal. Si le coges en brazos, porque le coges, si no le coges, porque no le coges. Si le dejas llorar porque le dejas llorar, si no le dejas, porque tiene que llorar. Si duerme contigo porque está mal, si no duermes con él, porque también está mal. ¿Haz lo que sientas y no entres en internet? Bien, yo más bien diría: haz lo que te pida tu bebé, hazle caso a él, porque al final es él el beneficiado o perjudicado. Lo que te pida, lo que le haga estar bien, será lo correcto para tu bebé.
Sobre el consejo de hacer un horario, no sé muy bien qué decir porque no lo entiendo mucho. Supongo que se refieren a poner a dormir al bebé según un horario, darles de comer del mismo modo, hacer nosotros las cosas cuando toquen, etc. En mi casa nunca hemos hecho nada parecido, así que no puedo decir que sea algo que funcione o no, aunque en nuestro caso, conociendo a nuestros hijos, seguro que nos habría creado más ansiedad que calma, por intentar cumplir un horario al que, probablemente, no habríamos llegado.
Genial el siguiente consejo, que más que consejo es una advertencia: ser padre no es nada fácil, es muy duro. Luego dicen algo así como sal a cenar fuera, deja al niño con alguien, y esto lo dejo a elección de cada pareja, pero yo no estoy de acuerdo. Sé que es muy duro, he tenido tres, pero un bebé es de su padre y de su madre y, normalmente, es a ellos a quien más necesita. Si hablamos de niños más mayores, adelante. Si hablamos de un bebé, no lo veo. En algún momento se despertará, llorará y buscará a su madre (al padre no le menciono aquí porque cuando un bebé llora no suele ser al padre al que busca).
El consejo número siete es muy válido también: no fuerces las situaciones, no trates de hacer que sean quien quieres que sean, ni trates de lograr que hagan lo que quieras que hagan. Cuando fuerzas las cosas se rompen, así que simplemente deja que te diga qué quiere y cómo lo quiere, y hazlo. Los bebés tienen una única misión, sobrevivir, así que hará todo lo posible por lograrlo y por eso te pedirá en cada momento lo que necesita para estar tranquilo y en calma, que será, a la vez, el mejor modo que tendrá de poder dedicar su atención a nuestro modo de vivir. No gastando tiempo ni energía en preocuparse por su seguridad y bienestar puede gastar ambas cosas en aprender, desarrollarse y adaptarse al mundo en que le ha tocado vivir.
El consejo número seis dice que debemos estar preparados para lo inesperado, porque puede suceder. Los ejemplos que dan no acaban de convencerme, pero es cierto: tus hijos te generarán dudas constantemente, y cuando las hayas resuelto crecerán y te generarán nuevas dudas, así que nunca te confíes y pon siempre empeño en ser un buen ejemplo para ellos.
En cuanto al número cinco, prepárale una habitación. Me parece un consejo totalmente prescindible, mas cuando nosotros compramos de todo para nuestros hijos y al final nos acabó sobrando prácticamente todo. Ya habrá tiempo de preparar una habitación cuando sea más mayor y entonces sí necesite una mesita donde dibujar y pintar, una camita donde dormir y sus juguetes. Ojo, luego ves a los padres del vídeo y parece que están en consonancia con lo que digo, que no tiene sentido que un bebé de 3 kilos tenga tantas cosas (quizás haya un error en la traducción).
El consejo cuatro viene a decir eso de "aprovecha, porque crecen muy deprisa". Se centran en guardar la ropita de bebé o sus cosas para guardar los recuerdos, pero en el fondo lo importante es tratar de vivir intensamente con ellos cada momento, o tantos momentos como se puedan. Si lo hacéis así no habrá razón para añorar tiempos pasados.
El número tres nos dice que debemos ser agradecidos, que a pesar de los malos momentos, los buenos compensan y que incluso cuando parece que no vas a salir adelante, lo haces y todo pasa, todo evoluciona, todo cambia y se hace diferente porque crecen, maduran y cambian también.
El siguiente consejo, el número dos, explica que no se puede ser perfecto, que será normal que perdamos la paciencia, que habrá días mejores y peores y que no podemos torturarnos por no ser unos padres modélicos, pues es un cambio tan grande que sentiremos emociones encontradas, en los extremos: la más inmensa felicidad y en otros momentos la más absoluta desesperación.
El último es el más conmovedor: prepárate a amar a alguien como nunca antes lo has hecho. No digo más al respecto porque cada padre y cada madre siente de diferente manera el cariño y el amor por sus hijos, pero coincido en lo diferente y especial de la relación porque vienen de ti, son parte de ti y te necesitan casi tanto como tú a ellos (a veces incluso menos, pues los niños llegan muchas veces para salvar a sus padres de su manera de vivir y de ser).
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