Mantener la casa limpia es necesario cuando tenemos un bebé, especialmente cuando empieza a gatear y a tocarlo todo. Sin embargo, hay que saber que un exceso de higiene tampoco es recomendable, puesto que un ambiente excesivamente limpio debilita el sistema inmune al evitar la exposición de los niños a cualquier tipo de gérmenes.
Al gatear, tocan el suelo o la alfombra, viéndose más expuestos a las partículas de polvo ambientales. Y según ha concluido un estudio publicado en Environmental Science and Technology ese contacto ayudaría a reducir el riesgo de asma en el bebé.
¿Qué tiene que ver el gateo con el asma?
Los bebés que gatean levantan una nube de polvo, que aunque sea imperceptible, al estar cerca del suelo, inhalan cuatro veces más de lo que un adulto podría respirar (por kilogramo de masa corporal).
Para estudiarlo, investigadores de la Universidad de Purdue crearon un bebé robot que gateara para tomar muestras de alfombras de hogares reales. "El objetivo era evaluar la exposición a las diminutas biopartículas y al polvo durante el movimiento de arrastre del bebé", señala Brandon Boor, profesor asistente de ingeniería civil y ambiental y ingeniería ecológica y principal autor del estudio.
Los científicos descubrieron que las concentraciones de las partículas en la nube de polvo que se encontraba alrededor del bebé robot cuando gateaba era hasta 20 veces mayor que el nivel en cualquier otro lugar de la habitación.
Estas micro partículas están formadas por células de la piel, bacterias, polen y esporas de hongos.
"Este es el primer estudio que muestra que los bebés que gatean están expuestos a concentraciones significativas de partículas biológicas suspendidas, y que muchas de estas partículas se depositan en las vías respiratorias inferiores del sistema respiratorio", dice Boor. "Su exposición se amplifican debido a la proximidad de sus zonas de respiración al suelo".
Casa limpia, pero no estéril
Como decíamos antes, hasta cierto punto es bueno que los niños se ensucien dado que su sistema inmunitario necesita unas mínimas dosis de gérmenes para estar activo y sano.
Su sistema inmune necesita aprender a defenderse contra distintas sustancias tóxicas y microorganismos patógenos, y este aprendizaje es fundamental en los primeros años de vida. Dicho de otro modo, estar expuestos a ciertos alérgenos aumentará las probabilidades de que generen inmunidad frente a ellos.
Así que, ya sabes, gatear es muy importante para el desarrollo del bebé que le permite prepararse para etapas posteriores. Pero ahora conocemos un nuevo beneficio para su salud respiratoria.
Vía | Parents
Más información | Environmental Science and Technology
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