Os propongo una actividad muy creativa y que seguro que a los más pequeños de la casa les va a encantar. Se trata de pintar con cubitos de hielo de colores. Además, ahora que comienza el calor la van a disfrutar muchísimo.
Necesitaremos una bandeja de cubitos de hielo, colorante alimentario, un papel grande y lo más grueso y resistente posible y, si queremos, unos palitos de helado para insertar en los cubitos y no tener que cogerlos con la mano.
Hay que añadir unas gotas de colorante alimentario al agua de cada compartimento de la bandeja de cubitos. La gracia, además, es mezclar los colores para conseguir nuevos tonos.
Cuando estén empezando a endurecerse pondremos los palitos de helado y cuando estén congelados los extraeremos. Con la mano o sujetando con el palito los hielos, al ir derritiéndose, dejan que el agua coloreada se convierta en un elemento creativo sobre el papel.
Ya solo queda que los niños den rienda suelta a su creatividad pintando con los cubitos de hielo coloreados. Lo van a pasar genial. Lo que no os aseguro es que no terminen pintándose el cuerpo también.
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