Hace unos días os hablábamos de un método de lengua se signos para hablar con los bebés, My Smart Hands, una metodología bastante seguida en países como Canadá o Estados Unidos y de la cual nos llega la información en castellano. En este vídeo vemos en acción este programa educativo de estimulación psicomotriz basado en la lengua de signos para bebés.
En las imágenes podemos ver cómo la mamá se comunica con su bebé. Pero si nos fijamos, no apreciamos demasiada diferencia en lo que solemos vivir con nuestros bebés sin aplicar ningún “método”. Esto es, la mamá pregunta con palabras (aunque se ayuda de los signos enseñados) y el bebé responde con sus palabras (abreviaturas, onomatopeyas, sonidos específicos) acompañadas de los signos que ha aprendido.
Es decir, igual que mi hija mayor decía (y dice) “elefante” levantando el brazo e imitando el barrito del animal, por poner un ejemplo. Que mi hija no empezaba a hacerlo tan pequeña como el bebé de las imágenes, puede ser. Pero tampoco era tan importante.
Sus sonrisas, sus llantos, sus dedos señalando o brazos dirigidos, sus “má” para “más”, “Mar”, “mamá”, sus “no”, sus “ti”, sus “gua”... casi siempre nos ayudaban a entenderla.
Pocas veces he sentido la necesidad de “ampliar vocabulario”, algo que sucede de manera natural y progresivamente en todos los bebés sin problemas. Uno de los “reclamos” para vender este método es que se reduce la frustración del bebé, pero tal vez deberían decir de los padres.
No sé por qué nos empeñamos en adelantar lo que llegará por la propia maduración del bebé, que camine, que controle los esfínteres, que duerma toda la noche, que hable…
Yo ya he comentado mis consideraciones acerca de este sistema, que creo que puede ser útil en algunos casos (niños con dificultades auditivas, discapacidad intelectual) y que los padres usamos en mayor o menor medida con nuestros bebés, sin necesidad de establecer un código cerrado.
Es decir, mi bebé me puede pedir su juguete señalando o inclinando la cabeza, o expresar que quiere agua diciendo “ga” o llevándose el pulgar a la boca… La forma de comunicarse de los bebés es increíblemente rica y compleja desde sus inicios.
En cualquier caso, este método lo que pretende es adelantar la comunicación simbólica con el bebé (todo lenguaje es simbólico, ya hablado, ya de signos), y en las imágenes vemos que el bebé ya es capaz de hablar mediante palabras, sus palabras, sílabas y sonidos. Está bien que se acompañen de los movimientos de las manos y brazos en el lenguaje de signos, creo que ejercita las habilidades motoras.
Si queréis hablar en lenguaje de signos en mayor medida, podéis coger algunos de los gestos de los que vemos en este vídeo de la madre comunicándose por señas con el bebé para aplicarlos con vuestros hijos. Pero nuestras propias señas y palabras también servirán para establecer una comunicación particular con los bebés que sin darnos cuenta se hirá haciendo mucho más compleja y completa en pocos meses.
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