Cuando mis amigas iban pasando por sus embarazos me fui dando cuenta de algo: todas me comentaban que veían muchas embarazadas. Que si cómo dicen que la natalidad es baja, que hay muchísimas embarazadas… Y durante mi embarazo pude comprobarlo: vemos más embarazadas cuando estamos embarazadas.
Imagino que el caso es como cuando te acabas de comprar una camiseta que acabas de descubrir en una tienda de moda. Nunca antes la habías visto, hasta que te la pones… y ¡empiezas a ver la misma camiseta por todas partes! Bueno, eso si es de Zara, H&M o El Corte Inglés, porque si compras en Yves Saint Laurent ya imagino que será más difícil ver la misma ropa…
Pero como estar embarazada no es algo tan “exclusivo”, pues resulta normal que cuando nosotras estamos pasando por dicha experiencia, que se convierte en un momento tan importante de nuestras vidas y vivimos con emociones diversas e intensas, nos fijemos más en el resto de embarazadas.
Se activa nuestro “radar de panzas”, como si tuviéramos un instinto nuevo para detectar embarazos, incluso incipientes.
Entonces, las embarazadas se miran con complicidad, alguna sonrisa, e incluso intercambiamos palabras si el destino nos une en la cola del súper o esperando al autobús, cuando antes probablemente ni nos hubiéramos percatado de su presencia ni hubiéramos hablado con ellas.
Porque… ¿de qué íbamos a hablar? Está claro que cuando estamos embarazadas las posibilidades de conversación se multiplican (aunque monotemáticas, claro):
- ¿Y de cuánto estás?
- ¿Qué tal las náuseas?
- ¿Sabes si es niño o niña?
- ¿Ya te has hecho tal prueba?
- ¿Con quién das las clases de preparación?
- ¿Dónde darás a luz?...
Incluso yo, que no soy muy dada a hablar con desconocidos, he participado en alguna de estas situaciones durante los embarazos, y he compartido experiencias, dudas o temores con otras mujeres embarazadas, especialmente al coincidir en las consultas del médico o en los laboratorios para los análisis.
Está comprobado: no es que haya más embarazos, es que cuando estamos embarazadas vemos más embarazadas. ¿No os ha sucedido a vosotras?
Foto | jaaron en Flickr
En Bebés y más | “¡Guapa!”... y embarazada: el placer de los piropos, ¿Nos cuidamos menos en el segundo embarazo?