Uno puede pensar que pintar un cuadro de un niño en pose angelical no representa un gran reto, piel lisa, líneas curvas, pieles rosadas, pelo rubio y ondulado, ojos claros, sonrisa dulce y ya tenemos nuestro niño Jesús, Querubín o pequeño angelito.
El problema reside en que no es algo tan sencillo como puede parecer a simple vista y el noble arte de las representaciones pictóricas de angelitos se pueden transformar en verdaderos muñecos diabólicos y ya puede ser nuestro joven modelo un el niño más bueno de la corte que va a quedar retratado como la niña del exorcista para los restos. En el siguiente vídeo os presentaremos una serie de las peores pinturas de querubines de la historia del arte.
Y es que tenemos de todo, desde niños con muy mal carácter a otros en los que el artista está claro que no era lo suyo lo de tratar con niños y decidió crear un clon de si mismo, incluso pinturas en las que resulta complicado saber que quería expresar el artista cuando pintó al niño en semejante pose.
Pero mejor es que lo veáis por vosotros mismos y nos contéis que os a parecido y si conocéis algún ejemplo, pero no me vengáis con el retrato que le hizo vuestra suegra a la niña el año pasado que ya sabemos el cariño que le tenéis algunas a la progenitora de vuestra pareja.
Vía | Buzzfed
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