Eduardo Punset es un divulgador científico, escritor español de gran prestigio que colabora en varios medios de comunicación y viejo amigo de este blog. Lola es admiradora de él y ya nos explicó cómo el abandono del bebé en la cuna es comparable al desamor de los adultos.
En este artículo breve que os recomiendo a todos: “¿Hay forma de mejorar el bienestar?” explica 4 ideas que tendrían un impacto sobre el bienestar de la gente sin estrategias complicadas ni grandes inversiones económicas. Simplemente “aprovechando lo que ya sabemos y sin perderse por las ramas”. Son:
- Crianza
- Dejar de contaminar los pozos acuíferos mediante purines
- Evitar la contaminación acústica
- Eliminar la publicidad engañosa
Estas son sus sabias palabras sobre cómo criar a los hijos: "Hay que querer a los hijos incondicionalmente. Se trata de uno de los descubrimientos más recientes e impactantes de los mecanismos afectivos. La manera más expeditiva de poner remedio a tanto desgobierno sentimental y a la depredación afectiva consiste, precisamente, en aceptar de una vez por todas que sin amor incondicional no hay proceso de aprendizaje posible. No hace falta descubrir la pólvora y dar con la mezcla ideal de recompensa y castigo para el aprendizaje. Querer a los hijos incondicionalmente no significa querer todos sus actos, sino hacerles sentir que existe un lugar, su hogar, donde son amados y protegidos por lo que son intrínsecamente. Verá como todo empieza a funcionar de una manera distinta."
¡Parece una obviedad pero no lo es¡
No sólo no hay amor incondicional en los miles de padres que abusan de sus hijos, tampoco lo hay en los millones de padres pacíficos que amamos a veces más nuestra propia comodidad, la disciplina y ciertas normas sociales que a nuestros hijos.
No hay amor incondicional en no darle de mamar amamantarlo con lactancia materna ni siquiera 1 día de vida y pedir voluntariamente la inyección/pastilla para cortar la leche, no hay amor incondicional en dejarle llorar en una cuna sin consolarlo, no hay amor incondicional en exigirles comportamientos de independencia impropios de su edad, no hay amor incondicional (ni comprensión sobre sus necesidades) en separarlos voluntariamente de sus padres largas horas en los primeros meses, etc.
¿Por qué creeis que San Agustín dijo: "dadme otras madres y cambiaré el mundo"? En la crianza con amor incondicional está el gran cambio de la Humanidad.
¡Que así sea¡
Vía | XL Semanal Más información | Blog de Eduard Punset En Bebés y más | Libro: Bésame mucho: ¿cómo criar a los hijos con amor? En Bebés y más | El cuidado y amor maternal causan cambios genéticos favorables En Bebés y más | ¿Qué es un bebé afortunado? En Bebés y más | Tus hijos no son tuyos En Bebés y más | 100 ideas para mejorar España ¿dónde está la crianza?