Hoy quiero recomendaros las películas de animación que tienen como protagonista al pequeño Kirikú. “Kirikú y la bruja” y “Kirikú y las bestias salvajes”, ambas dirigidas por Michel Ocelot, un francés que pasó parte de su infancia en Guinea y que luego, de regreso a Francia, se especializó en el cine de animación y la creación artística.
Las dos películas, de 1998 y 2005 respectivamente, narran las aventuras del inteligente y sensible Kirikú, un niño diminuto que ha nacido en un poblado africano sobre el que la terrible bruja Karabá ha extendido un maleficio. En sus andanzas, el pequeño salva varias veces a su pueblo con sus ideas y su valor, enfrentándose al mal y descubriendo, al final, que las personas mas malvadas suelen serlo por un sufrimiento del que pueden ser salvadas con comprensión.
Kirikú es enormemente sabio en empatía y en capacidad de análisis libre de convencionalismos sociales. La belleza de la música, de los diálogos y la exquisita factura de la animación nos transportan a un mundo ideal donde brota la belleza y en el que, los niños, pueden ser maestros de la vida a pesar de que nadie, al principio, confie en sus capacidades.
Habituados a las películas infantiles de animación en las que hay agresividad, violencia y roles sexistas, estas son, en cambio, un soplo de aire fresco y de dulzura, además de una fuente de reflexión y aprendizaje sobre los valores humanos. Os encantarán estas dos películas del pequeño Kirikú; estoy segura de ello y os las recomiendo para niños de 3 a 6 años.
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