A estas horas seguro que en muchas casas ya estáis abriendo los regalos que los Reyes Magos os han dejado, ¿han sido generosos con vosotros?
Para los más pequeños, sin duda habrán traído juguetes muy especiales pero ¿con cuántos de ellos seguirán jugando cuando el mes de enero termine? Probablemente, con muy pocos. Al final, aquellos juguetes sofisticados que con tanta ilusión pidieron suelen pasar al rincón del olvido muy pronto y son los juguetes más sencillos los que por más tiempo se usan.
El juguete más sofisticado sólo puede ser aquello para lo que ha sido diseñado
Hay muchas razones por las que algunos juguetes caen pronto en el olvido de nuestros niños pero una de ellas seguramente sea que cuanto más sofisticado sea el juguete, menos lugar deja a la imaginación y sólo puede usarse para aquello para lo que fue diseñado.
Sin ir más lejos, en nuestra casa está ocurriendo ya con los regalos que Papá Noel dejó hace apenas unos días. En concreto, el regalo que con más ilusión pidió nuestro hijo mayor, "La Guarida de Jake", un juguete que llevaba pidiendo desde el verano, apenas le ha entretenido durante dos días seguidos. ¿Por qué? Pues porque una vez que ha abierto y cerrado las hojas cien veces, una vez que ha disparado el cañón y subido la plataforma otras tantas, se acabó: el juguete no da para más. Podría inventar alguna historia con los muñequitos que ya tiene (tiene a casi todos los personajes de Jake y los Piratas) pero para inventarse historias no necesita usar La Guarida, que sólo permite abrir y cerrar sus hojas hasta el aburrimiento y poco más.
Muchos juguetes sofisticados tienen un uso muy limitado. Una vez que se han usado intensivamente durante los primeros días, los niños se aburren de ellos y buscan nuevas aventuras. Eran muy bonitos, parecían hacer cosas increíbles (sobre todo en la publicidad) pero en la práctica no eran suficiente estímulo para la desbordante necesidad de aprendizaje y diversión que tienen los niños.
El juguete más sencillo, el que puede ser cualquier cosa
Ese anuncio que se ha hecho tan viral, el del niño que se vuelve loco de alegría al recibir un palo, da completamente en el clavo. ¿Qué puede ser un palo? Una espada, una varita mágica, una pértiga, un remo, un caballo, una escoba, un cetro... ¡Puede ser muchísimas cosas! Y hoy puede ser una cosa, y mañana otra, y si lo coge otra persona seguro que inventará un uso completamente distinto.
Seguro que en muchas casas las cajas de los juguetes de hoy darán mucho juego ¡dejadlas a mano unos días antes de tirarlas! Es posible que como adultos nos fastidie un poco que le hagan más caso al envase que al contenido pero ¡así son los niños!
En nuestra casa, como por trabajo recibimos cajas enormes, una vez colocada la mercancía que viene dentro las utilizamos para hacer casitas. Como no recibimos dos cajas iguales, cada vez que viene una grande nos lo pasamos bomba diseñando primero el proyecto y después llevando a cabo. La última la hemos convertido en un castillo con puente levadizo incluído, además de haberla pintado convenientemente por fuera con pintura de dedos.
No hay nada mejor que la imaginación de un niño en plena acción. Y para estimularla no son necesarios juguetes llenos de luces y sonidos (aunque a veces puedan estar muy bien), en muchos casos utilizando cosas que tenemos por casa podemos pasarlo muy bien de una manera sencilla, económica y hasta ecológica (por aquello de darle una segunda vida a cosas que de otro modo probablemente hubieran acabado en la basura).
Así que, como el año es muy largo y los juguetes que reciban ahora no les van a entretener durante mucho tiempo, podemos proponernos en 2014 utilizar más aquello que tenemos más a mano: hueveras, cajas de cartón, rollos del papel higiénico o de cocina terminados, botellas vacías (por ejemplo para meter y sacar bolitas, algo que les encanta a los bebés), ¡todo lo que se os ocurra!
Pero los Reyes Magos seguirán trayendo lo que pidan los niños
¡Los niños mandan! Y, por eso, los Reyes Magos seguirán trayéndoles aquello que pongan en su carta, aún sabiendo que serán juguetes de un día, si acaso un par de semanas.
¿Cuál es vuestra experiencia? ¿Qué juguetes han sido los que más han usado vuestros hijos? ¿Estáis de acuerdo en que los juguetes más sencillos son los que finalmente se usan por más tiempo?
Foto | Daniela en Flick CC En Bebés y Más | Crea juguetes caseros: consejos de Unicef