Aunque con un fin de semana de retraso, no me gustaría dejar pasar la ocasión de recordar que el pasado 5 de junio se celebró el Día Mundial del Medio Ambiente. Una de las cuestiones que como ciudadana y especialmente como madre me preocupa es la fragilidad de nuestro entorno, y me gustaría transmitirle a mis hijas la importancia de su cuidado y respeto.
La viñeta que precede estas líneas da cuenta de un imaginario futuro en el que ya somos abuelos y somos testigos de cómo se puede deteriorar nuestro entorno. Los niños no conocen un mundo en el que nos podíamos bañar en el mar o no había que llevar máscaras para respirar aire puro.
Esperemos que esta visión apocalíptica nunca llegue a producirse, pero seguro que hace siglos las personas que habitaban este planeta ni podían imaginar hechos que lamentablemente sí se están produciendo, como la contaminación masiva, la falta de agua, el calentamiento global...
Desde 1973, cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente que fue establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas con la que se dio inicio a la Conferencia de Estocolmo (Suecia), cuyo tema central fue el Ambiente.
Allí la Asamblea General de la ONU aprobó la creación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Por medio de este día se pretende sensibilizar a la opinión mundial en relación a temas ambientales, intensificando la atención y acción de las autoridades y de la población en general.
Fomentando el cuidado al medio ambiente garantizamos un futuro más próspero y seguro para nuestros hijos, para nuestros nietos y las generaciones venideras. Existen muchos modos divertidos de celebrar con nuestros hijos el día del Medio Ambiente, cualquier día del año.
- Plantación de árboles
- Creación de huertos
- Apagar las luces
- Cerrar los grifos
- Leer cuentos para la educación ambiental
- Reciclar
- Cuidar las plantas
- Dibujar la naturaleza
- Pasear y jugar al aire libre
- Visitar el parque, el jardín, el zoo, el río, la playa...
Junto a nuestros hijos y mediante la implicación de toda la sociedad podemos evitar un futuro como el de la viñeta, amando y respetando nuestro entorno natural y siendo conscientes la importancia de su cuidado.
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