Antaño, las abuelas pretendían pronosticar por la forma de la tripa y por su tamaño, el sexo y otros detalles relacionados con el futuro bebé. Hoy en día se sabe que esto es falso.
La forma y tamaño de la barriga pueden depender de algunos factores que explicamos a continuación.
Influye el tamaño y la posición el feto, por ejemplo, si el futuro bebé está atravesado, la tripa es más ancha que alta. Si el feto está de pie o de cabeza, entonces la tripa es alta y estrecha. Claro que también cuenta el número de fetos existentes, si son dos o tres, la tripa es redondeada y en ocasiones tiene contornos irregulares.
Las características físicas de la mujer también son muy influyentes, por ejemplo, si se poseen músculos abdominales muy desarrollados, la tripa es mucho más plana y alta, si por el contrario la musculatura es flácida, la tripa es mucho más picuda ya que el útero se desvía hacia delante.
Otros rasgos que influyen en la forma de la tripa es la columna vertebral, la desviación de esta provoca una tripa prominente. La obesidad camufla a menudo el volumen del abdomen y la estatura es influyente también.
Bueno, con esta básica explicación, comprenderemos que resulta difícil conocer el sexo del bebé antes de una eco, y el poder adivinatorio de las abuelas y los dichos populares, quedan en un juego de adivinación.
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