En Bebés y más hemos hablado de la importancia que tienen los tíos y las tías en la vida de los niños, particularmente durante la infancia. Y es que los hermanos y hermanas de los padres y madres también son personas valiosas para los niños, puesto que además de quererles y cuidarles ocasionalmente, también hay momentos en los que se vuelven sus cómplices.
Pero, ¿cómo varía la relación que tienen los tíos con sus sobrinos? De acuerdo con algunas investigaciones, los tíos solteros serían los que tienen una relación más estrecha con ellos. Te contamos por qué y cómo evoluciona esta relación.
La relación entre tíos y sobrinos
Quienes tenemos sobrinos (y además hijos propios) podemos confirmar que el amor que sentimos por ellos incondicional y, aunque pudiéramos afirmar que se trata de una relación similar a la que tenemos con nuestros hijos, es además algo muy divertido.
Siendo tíos, como alguna vez lo mencioné cuando hablé acerca del amor que siento por mi sobrina, es convertirte en compañero de juegos y cómplice de travesuras. Es ser colaborador en la crianza, pero regularmente llevándote solo las partes más ligeras de ella.
En relación a este último punto, un estudio señala que los tíos somos una especie de 'ayudantes en el nido' al apoyar a los padres con la crianza de nuestros sobrinos. Pero como mencionamos al inicio de este artículo, nuestro papel de tíos/ayudantes cambia según nuestra situación de vida.
Los tíos solteros, los más involucrados
De acuerdo con ese mismo estudio, realizado en Estados Unidos, las parejas sin hijos son significativamente más propensas a cuidar a una sobrina o sobrino, en comparación con las parejas que ya tenían hijos propios. Curiosamente, también las parejas sin hijos son más propensas a tener más sobrinas y sobrinos pequeños o jóvenes en su hogar, que las parejas con hijos.
Otro estudio similar realizado en Finlandia, encontró que las mujeres sin hijos son las más propensas a invertir tiempo en sus sobrinas y sobrinos, en comparación con las que ya tenían hijos propios.
Estos resultados tienen mucha lógica: el no tener la responsabilidad y el agotamiento que conlleva el criar y cuidar hijos propios, los tíos y tías solteros tienen una mayor presencia y participación en la vida de sus sobrinos, gracias a la disponibilidad que tienen en sus rutinas.
Por otro lado, los tíos no tienen la obligación de educar como los padres y además tienen una ventaja importante que no tienen otros familiares que también son importantes para los niños -como los abuelos-: su edad. Al ser jóvenes y no ser los encargados de la crianza, cuentan con mayor energía para jugar y divertirse con sus sobrinos.
En resumen, los tíos pueden ser ayudantes en la crianza y apoyar a los padres ocasionalmente, pero además de "malcriar" como lo harían los abuelos, también aportan diversión y comparten complicidad con sus sobrinos, especialmente cuando aún no tienen hijos propios.
Foto de portada | Karolina Grabowska en Pexels