La lactancia materna tiene múltiples beneficios para el bebé, y también para la madre. Un nuevo estudio realizado por científicos de la Universidad de Cambridge y publicado en la revista Maternal and Child Health (Salud materna e infantil) afirma que amamantar al bebé podría reducir el riesgo de de depresión postparto en la madre.
Analizaron los datos de 14.000 nacimiento en el suroeste de Inglaterra y encontraron que las mujeres que planeaban amamantar, hubo una reducción del 50% en el riesgo de depresión posparto si comenzaban con la lactancia.
Esta protección frente a la depresión vieron que aumentaba con cada semana que se extendía el amamantamiento hasta el mes de vida, que es el período que estudiaron. Creen que la liberación de hormonas que produce sensación de bienestar al succionar el bebé son las responsables de este efecto beneficioso.
No obstante, un dato alarmante, que hace ver la importancia de brindar ayuda adecuada a las madres que desean amamantar a sus bebés es que el riesgo de depresión aumenta a más del doble entre las mujeres que querían amamantar, pero no lo consiguieron.
Sentimientos como frustración, impotencia y culpa son habituales en las madres que se ven incapaces de dar el pecho, pero con el apoyo oportuno muchas de ellas podrán dar el pecho y las que no, también necesitan apoyo para prevenir una depresión.
Las madres recientes pueden llegar a verse muy presionadas frente a las críticas del entorno, que desmoralizan y hacen tomar decisiones equivocadas. Lo que necesitan es rodearse de personas que la apoyen y refuercen la confianza en su papel, tanto profesionales como familiares y amigos.
Vía | BBC
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