Hemos comentado en varias ocasiones que la leche materna es un alimento vivo, inteligente e inimitable, que se adapta a las necesidades del bebé en cada etapa de su desarrollo. De ahí que se recomienda de forma exclusiva durante los primeros seis meses del bebé y complementada hasta al menos los dos años de vida.
Los científicos siguen investigando sus componentes, y recientemente un grupo de investigadores han descubierto unos biomarcadores del cáncer de mama en la leche materna, según han explicado en la reunión anual de la Sociedad Americana de Bioquímica y Biología Molecular durante el encuentro de Biología Experimental (EB) 2022, celebrada en Filadelfia (Estados Unidos).
Concretamente, han identificado ciertas proteínas presentes en la leche materna que también pueden detectarse en el suero sanguíneo. Este hallazgo abre la puerta a una posible detección temprana del cáncer de mama con un simple análisis de sangre en mujeres de todas las edades.
Posible detección temprana del cáncer de mama
"Aunque las mamografías son una herramienta útil para detectar el cáncer de mama de forma precoz, no se suelen recomendar a las mujeres de bajo riesgo menores de 40 años. Dado que los biomarcadores que hemos encontrado en la leche materna son también detectables en el suero sanguíneo, el cribado podría realizarse potencialmente en mujeres de cualquier edad utilizando sangre o leche materna”, explica Danielle Whitham, candidata al doctorado en la Universidad Clarkson, en declaraciones recogidas por Europa Press.
Los biomarcadores identificados corresponden a un tipo específico de cáncer denominado carcinoma ductal invasivo (CDI), uno de los tipos más comunes de cáncer de mama. Sin embargo, los investigadores afirman que su método podría utilizarse para identificar biomarcadores para otros tipos de cáncer de mama.
La detección del cáncer de mama a través de un análisis de sangre
El equipo utilizó la “leche materna porque contiene proteínas, células epiteliales y células inmunitarias, todo lo cual proporciona una gran cantidad de información sobre lo que está sucediendo en el cuerpo de una mujer durante un momento crucial en el desarrollo del pecho".
Para el estudio, se obtuvieron muestras de leche materna de tres mujeres a las que se les había diagnosticado cáncer de mama y de tres mujeres sin cáncer.
Los investigadores compararon los niveles relativos de ciertas proteínas entre los dos grupos para identificar las diferencias en las mujeres con cáncer. El análisis reveló 23 proteínas que estaban desreguladas. Todas las proteínas que mostraban diferencias habían demostrado anteriormente que desempeñaban un papel en el cáncer o el desarrollo de tumores.
Una vez identificados los biomarcadores, planean confirmar los hallazgos con un grupo mayor de mujeres. El siguiente paso es comprobar la aplicabilidad de los biomarcadores proteicos en el suero sanguíneo. Si esas pruebas tienen éxito, el equipo asegura que podría desarrollarse un análisis de sangre que se utilizaría en mujeres de cualquier edad para controlar los cambios en las proteínas con el fin de detectar el cáncer de mama.
"Si nuestros estudios futuros tienen éxito, podría cambiar la forma en que se controla a las mujeres para detectar el cáncer de mama y ayudar a un diagnóstico más temprano”, concluyen.