Actualmente, España cuenta con 16 semanas de permiso de nacimiento para el padre y el mismo periodo para la madre, que por cierto no se modifica desde hace 25 años. Ampliar progresivamente el permiso de los padres hasta equipararlo con el de las madres ha sido un gran avance para fomentar la corresponsabilidad e igualdad de género.
Así concluye un amplio estudio publicado por el Instituto de Estudios Fiscales, perteneciente al Ministerio de Hacienda, que analiza los permisos por nacimiento desde 2016 hasta 2023.
Pero los expertos que realizaron el estudio también llegan a una conclusión importante y proponen un cambio.
Los padres ya no tienen miedo a disfrutar de su permiso de paternidad
Es evidente que está cambiando la visión de la sociedad con respecto al disfrute del permiso al que tienen derecho los padres tras el nacimiento de un hijo, y es algo que ha ido mejorando año tras año.
En 2021, un 89,5% de los papás utilizaron todas las semanas a las que tenían derecho, cifra que ha aumentando a un 91,2% en 2022 y a un 91,6% en el primer trimestre de 2023 (últimos datos disponibles). Eso sí, si lo comparamos con las madres, este porcentaje se sitúa en torno al 99%.
Pero, ¿cuál es el problema? Que se disfrutan ambos permisos a la vez
El estudio, además de analizar cuánto se usan los permisos, también analiza cómo usan los permisos los padres y las madres, es decir, si los usan simultáneamente, de forma que ambos progenitores coinciden, o si los usan por turnos.
Estas son las principales conclusiones:
- De las madres, un 95% usa sus 16 semanas de forma ininterrumpida tras el parto.
- De los padres, un 50% usa las 16 semanas de forma ininterrumpida tras el parto, coincidiendo, por tanto, todo el permiso con las madres.
- De los padres, solo un 20% fracciona su permiso usando, en primer lugar, las 6 semanas que obligatoriamente se deben utilizar tras el parto, y usando, posteriormente, las 10 semanas restantes una vez la madre ha terminado su permiso.
El cambio que se propone: usar el permiso de nacimiento por turnos
La distinción entre que el padre use el permiso a la vez que la madre o que, por el contrario, use sus 10 semanas fraccionables cuando la madre ya se ha reincorporado al trabajo, es importante en términos de corresponsabilidad. Según los expertos que realizaron el estudio, se entiende que esta última forma de utilizar el permiso, por turnos, es la que más favorece que los padres se responsabilicen de los cuidados del bebé. Claro, en ese caso deberían cuidar solos al bebé durante 10 semanas y no junto a la madre, que es más fácil.
Pero lo verdaderamente importante es que quien saldría más beneficiado con este cambio es el bebé, al extenderse el tiempo de cuidado en casa el máximo tiempo posible: 26 semanas si padre y madre usan el permiso por turnos.
De todas maneras, lo deseable sería que el permiso por nacimiento se extendiera al menos a 20 semanas para cada progenitor, como se había prometido desde el Gobierno, medida que de momento ha quedado en el limbo.