Hace algunos meses Estados Unidos alertó del uso adecuado de una hamaca mecedora de la marca Fisher-Price tras la muerte de diez bebés, un producto que posteriormente fue retirado del mercado por petición de la Academia Americana de Pediatría (AAP), debido a que el número de muertes relacionadas con su uso había sido en realidad más de 30.
Tras estos sucesos, se empezó a planear un proyecto de ley llamado "Safe Sleep for Babies Act of 2019" (Ley para un sueño seguro de los bebés 2019", en el cual se pide la prohibición de los protectores de cunas y los productos para dormir con inclinación, como las hamacas mecedoras. Te contamos de qué se trata y por qué pueden ser peligrosos estos productos para los bebés.
El proyecto de ley
De acuerdo con información de Consumer Reports, este proyecto de ley fue enviado al Senado estadounidense para su revisión y aprobación, y con él, se espera prohibir la venta y distribución tanto en tiendas físicas como en tiendas en línea de todos los protectores de cuna y productos para dormir con inclinación.
La propuesta de ley no llega de forma sorpresiva, pues como lo mencionaba al inicio, después de las noticias acerca de las muertes de bebés al utilizar una hamaca mecedora, se decidieron tomar medidas para retirar por completo ese tipo de productos y así prevenir que ocurrieran más tragedias.
En total, han sido 73 las muertes de bebés relacionadas con el uso de hamacas mecedoras o productos para dormir con inclinación, mientras que en el caso de los fallecimientos relacionados con los protectores de cuna, habían sido 48.
Por qué no se recomiendan estos productos
En Bebés y más hemos hablado muchas veces de la asfixia postural o posicional, que es cuando se coloca al bebé en una sillita o productos para dormir con inclinación y su propio cuerpo (por la fuerza de la gravedad) se flexiona sobre sí mismo, haciendo una "C" demasiado pronunciada que dificulta que puedan expandir el tórax y el abdomen para respirar.
En el caso de los protectores de cuna, desde hace varios años no se recomienda utilizarlos, debido al riesgo de asfixia que representan, pues si el bebé al moverse llega hasta ellos y pega su carita, puede tener dificultad para respirar.
Recomendaciones para un sueño seguro
Organismos como la Asociación Española de Pediatría (AEP) y la Academia Americana de Pediatría (AAP), han publicado y compartido en diversas ocasiones sus recomendaciones, que ayudan a prevenir las muertes accidentales o por el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL).
Estos son los puntos más importantes en cuanto a las recomendaciones para un sueño seguro del bebé y reducir el riesgo de asfixia:
- Acostar al bebé sobre su espalda en una superficie firme como un moisés o una cuna con una sábana ajustable.
- El colchón en el que duerma el bebé debe ser duro, resistente y transpirable, evitando que se hunda en él. Sus medidas deben ser adecuadas a la cuna, ya que un colchón pequeño puede dejar huecos que pueden ser peligrosos para él.
- No usar almohada, pues aumenta el riesgo de asfixia. A partir de los dos años los niños pueden utilizar, si así lo desean o lo necesitan, una almohada delgada, pequeña y firme, aunque lo ideal es continuar sin almohada el mayor tiempo posible.
- Evitar el uso de ropa de cama como protectores la cuna, mantas, cobertores, cojines y juguetes suaves, como peluches. La cuna debe estar totalmente libre.
- Evitar abrigar en exceso al bebé y mantener la habitación a una temperatura agradable.
- Que el bebé duerma en la misma habitación que los padres, pero no en la misma cama. La AEP recomienda hacerlo hasta los seis meses como mínimo, mientras que la AAP recomienda extenderlo hasta los 12 meses.
- Si se practica colecho, que sea de forma segura. La AEP recomienda no hacerlo antes de los tres meses, mientras que la AAP recomienda esperar hasta los seis meses.
- Evitar los productos e inventos que prometen reducir el riesgo de muerte súbita como los cojines antivuelco o posicionadores. Lo único que debe estar en la cuna es el bebé.
Foto | Pixabay
Vía | Mom
En Bebés y más | En la cuna del bebé, ni mantas ni almohadas: la ropa de cama es causante de casi el 70% de los casos de muertes por asfixia, Los cojines antivuelco o posicionadores para la cuna son peligrosos para los bebés por el riesgo de asfixia