Sabemos que la tasa de cesáreas en muchos países supera lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud, que no deja de realizar advertencias sobre el abuso de esta intervención. El miedo de los médicos a recibir una denuncia por la complicación del parto también juega un papel importante a la hora de practicar una cesárea.
El retraso de la maternidad, que siempre supone un mayor riesgo, junto con los tratamientos de infertilidad que han provocado un incremento de los embarazo múltiples, también se encuentran entre los principales factores que están disparando este tipo de asistencia en los últimos años.
En muchas comunidades la tasa de cesáreas supera el 20% de los nacimientos, mientras que la tasa considera como normal por las sociedades científicas se sitúa en el 15% y según la OMS en el 10%. Los peores datos, como siempre, se lo llevan los centros privados, donde el porcentaje de cesáreas se dispara.
Un aumento que desde los propios centros de reproducción asistida y muchos profesionales de la salud están intentando frenar, como en algunos hospitales, fomentando los partos lo más naturales posibles, siempre que no existan riesgos.
Sin embargo, los médicos también reconocen, imagino que "extraoficialmente", que en los últimos años se está practicando cada vez más en la sanidad la llamada "medicina defensiva" por la mayor exigencia de los pacientes y por el incremento de las demandas judiciales.
Incluso, la especialidad de ginecología no es la más apetecida por los estudiantes de medicina, entre otras razones por el incremento de las denuncias contra los médicos.
De momento, lo que sí podemos afirmar es que el miedo a las denuncias es uno de los motivos por el que se quieren evitar complicaciones en el parto mediante la cesárea. Resulta significativo que las denuncias hayan aumentado en este campo, ¿será que no se hacen las cosas todo lo bien que se debiera, o que nos estamos dando cuenta de que tenemos derechos a la hora de parir?
Vía | Las Provincias En Bebés y más | Cesárea