La depresión en el postparto es un fenómeno ligado a la tormenta hormonal que sigue al embarazo pero también es una cuestión emocional y psíquica nacida del gran cambio al que la mujer se enfrenta cuando se convierte en madre. También existe la depresión post-adopción.
Un estudio publicado recientemente en la revista americana Western Journal of Nursing Research y realizado por la doctora Karen Foli acaba de poner de manifiesto que las madres adoptivas también pueden sufrir una depresión paralela al "baby blues" o tristeza del postparto.
La madre, cuando recibe a su hijo adoptado, igualmente debe reconsiderar sus prioridades vitales y rememora su infancia y su relación con su madre, tratando de descubrirse a si misma, asumiendo lo positivo de su propia crianza y reinventando como va a hacerlo ella misma.
Cuando nace un bebé nace también una madre y eso desencadena una tormenta emocional muy intensa en la mujer. Esta situación psíquica se da igualmente en las mujeres adoptantes, ellas también nacen como madres y el renacimiento no está exento de temores, emociones desatadas y reconstrucción de la imagen de si misma.
Se remueven muchas cosas del propio pasado, de la infancia y de la propia historia vital.
Conocer que las madres adoptivas también pueden sufrir una depresión post-adopción ligada a la llegada de su hijo debería ser tenido en cuenta a la hora de diseñar estrategias sanitarias de prevención y atención temprana.
Via | Le Figaro Más información | Karen Foli