Dentro del Congreso Internacional de Medicina Perinatal y Neonatología que nos comentaba nuestra compañera Dolores, se ha tratado el tema de la ventilación artificial en bebés prematuros.
La ventilación o respiración mecánica es un procedimiento en el que un ventilador o respirador respira o colabora temporalmente por el bebé, proporcionándole el oxígeno que necesita y que no puede lograr con su respiración normal por falta de madurez y desarrollo en su sistema pulmonar o nervioso. Esto se consigue a través de un tubo endotraqueal, a través de la boca o la nariz y hasta la traquea, cada bebé, según sus necesidades, recibe una cantidad de respiraciones por minuto, presión de aire, cantidad de oxígeno.
Eduardo Bancalari, director de la Unidad de Neonatología del Jackson Memorial Hospital en Miami (EEUU) y profesor titular de Pediatría y Ginecología de la Universidad de Miami, ha manifestado que el uso de estos ventiladores en bebés muy prematuros puede desarrollar daños en los pulmones y un posterior desarrollo deficiente de sus órganos. Bancalari propone utilizar alternativas para evitar el ventilador mecánico y con él, los riesgos de que el neonato reciba presiones muy altas que resulten agresivas y las posibles infecciones en los pulmones inmaduros. Por ejemplo, el uso de la presión positiva continua, que ofrece, a través de unos pequeños tubos en la nariz que aumenta la cantidad de aire inspirado sin incrementar el trabajo de la respiración.
Destacó además que la tecnología en neonatología no es la única y mejor herramienta, es necesario un buen programa de salud, siendo Estados Unidos un país que encabeza la investigación y el desarrollo tecnológico, cuenta con una tasa de mortalidad infantil mucho más alta que Japón, Suecia y algunos países europeos.
Vía | Radio Granada