Ocho casos de sarampión confirmados en el hospital pediátrico Giovanni XXIII de Bari (de los que cinco son niños), han hecho despertar de nuevo las alarmas en Italia.
El nuevo brote parece tener su origen en una niña de diez años sin vacunar, que fue hospitalizada en la sala de enfermedades infecciosas del hospital. Segun explica el diario La Repubblica, la pequeña habría infectado a su hermana menor y a un niño de apenas 11 meses de edad ingresado por una otitis en el mismo hospital, demasiado pequeño para ser vacunado.
Tres adultos más con sarampión
También se han detectado tres casos más de sarampión en mujeres que están relacionadas con el centro hospitalario de Bari, aunque se está investigando si tienen un mismo origen.
Una de ellas es una trabajadora del centro y otra estuvo en observación en urgencias durante 12 horas por una sospecha de hepatitis, una de las posibles complicaciones del virus.
La tercera mujer, madre de gemelos, acompañó a uno de ellos al hospital infantil por otras razones, y parece que ya habría llegado con síntomas de sarampión.
Las medidas de prevención parecen haber fallado
Fuentes del hospital italiano señalan que algunos de estos casos podrían deberse a una gestión incorrecta del protocolo de gestión de enfermedades contagiosas, por lo que ya se está realizando una auditoría interna para determinar si no se aisló a la niña o no se hizo correctamente.
A raíz de los hechos, la Ministra de Sanidad, Giulia Grillo, ha anunciado un nuevo plan para la eliminación del sarampión y de la rubéola, ya existente aunque sin actualizar desde 2011, así como una circular para estandarizar los protocololos de actuación en casos de aparición de estas enfermedades contagiosas.
Los protocolos italianos prevén el aislamiento y la mera sospecha de un caso de sarampión debe comunicarse al Departamento de Prevención de la Asistencia Sanitaria Local, "porque el sarampión es una de las enfermedades más contagiosas que conocemos", señala Maria Chironna, directora del laboratorio de epidemiología de la Universidad.
La experta añade que estos casos han servido para recordar una vez más que la única prevención contra el sarampión es la vacuna, y que la responsabilidad no se limita solo al bienestar de sus propios hijos, sino también al del entorno que les rodea.
Una medida con especial relevancia en Italia, donde ha habido un repunte de esta enfermedad infecciosa, que puede evitarse con una vacuna que está recomendada a los 13 meses.
De hecho, el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre los casos de sarampión en Europa, señalaba a este país como el cuarto con mayor número de casos de esta enfermedad contagiosa durante el primer semestre de 2018 (2.020).
En 2017 cuatro personas murieron por esta enfermedad evitable con una vacuna "segura, eficaz y económica", como recuerda la OMS.
Vía | La Repubblica
Fotos | iStock
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