Qué dice la liga para la libertad de vacunación acerca de las epidemias de sarampión

Qué dice la liga para la libertad de vacunación acerca de las epidemias de sarampión
28 comentarios

Buscando información para escribir las dos entradas acerca de vacunas ofrecidas ayer y anteayer quise entrar en la página web de la liga para la libertad de vacunación, en la que no había entrado nunca y en la que esperaba encontrar una página cargada de información y noticias, tanto a favor como en contra de las vacunas, ofreciendo todos los datos posibles para que los padres, conociendo toda la información, tomáramos una decisión, como dicen, libre.

Esperaba encontrar noticias sobre los brotes de sarampión recientes, sobre la muerte de la joven andaluza y sobre lo sucedido en Francia, de igual modo que esperaba encontrar noticias y datos acerca de autismo, mercurio, papiloma y otros temas de los que hablan a menudo los que no están de acuerdo con las vacunas.

Esperaba encontrar todo esto porque cuando se crea una liga llamada “para la libertad de vacunación”, entiendo que lo que pretende es ser una fuente fiable y cristalina de información, con todos los pros y todos los contras de vacunar a los niños para solventar, precisamente, aquello que critican, las teóricas mentiras y la manipulación de aquellas personas que abogan por vacunar a todos los ciudadanos posibles.

Mi sorpresa llegó cuando no vi ni una (puñetera) noticia acerca del sarampión ni ninguna mención a los brotes que están apareciendo.

Tan solo noticias acerca de efectos secundarios, de casos aislados de reacciones, de razones para no vacunarse de la Gripe A, etc. Lo siento, pero para mí esto no es promover una libre vacunación, sino promover la no vacunación ofreciendo información parcial. No tiene sentido que se quejen de que todos los que vacunamos a nuestros hijos vivimos engañados si luego ellos engañan al no dar todos los datos posibles.

Sí pude ver en una esquina de la página un enlace a un informe en el que hablan del sarampión, titulado “Informe sarampión”, que me produjo cierta ilusión al verlo (porque pensé “ah, mira, malpensado, que aquí lo ponen todo”), pero que me demostró no tener nada que ver con lo que esperaba encontrar y que además data de Diciembre del año pasado.

Se trata de un informe que trata de tranquilizar a las familias que no han vacunado sobre el sarampión interpretando gráficas y datos, un poco como les da la gana (porque el gráfico que se ve demuestra que la vacunación ha sido efectiva para controlar la enfermedad), y centrándose mucho en las muertes por sarampión (que ya dijimos ayer que en el primer mundo son pocas) y mucho también en desprestigiar la vacuna.

cuadro-sarampion.jpg

Si os fijáis en el cuadro, la vacuna se empezó a poner a principios de los años 80. Según nos comentan, con la vacuna no sólo no bajó la incidencia, sino que aumentó, y eso se observa en dos grandes picos elevados. Dicho así parece hasta cierto, sin embargo, como dice Carlos González en su libro “En defensa de las vacunas”, y como seguro que todos y todas observáis, la tendencia final es a llegar hasta casi “0” morbilidad, cuando antes de la vacuna sólo se producían oscilaciones que mantenían la enfermedad en una media de unos 8.000 casos anuales declarados.

Los picos, que los antivacunas pretenden mostrar como efecto secundario de la vacuna no pueden ser tales, porque en el momento que se introduce la vacuna del sarampión se empiezan a vacunar a los niños a una edad determinada, pero no se vacunan a todos los niños del país de golpe. De hecho, la cobertura vacunal cuando sucede el primer pico es cercana al 50%, cuando sucede el segundo pico es del 80% (a más vacuna debería haber más morbilidad, si nos creemos lo que dicen los antivacunas) y dicha cobertura sigue subiendo a medida que la morbilidad baja y baja.

Entonces, ¿a qué se deben los picos? Pues seguramente a que al iniciarse la campaña de vacunación se inició también una campaña informativa a los profesionales sanitarios: aparece la vacuna del sarampión, protegeremos a los niños de esta enfermedad, cuando veáis un caso hay que declararlo, etc. Probablemente muchos de los médicos que no estaban declarando la enfermedad porque “no suelo hacerlo”, “veo tantos niños que se me olvida” o “no me parece importante hacerlo”, empezaron a declarar todos los casos que pasaban por la consulta y de ahí los dos picos elevados.

En cualquier caso, como digo, se ve claramente que la enfermedad se empezó a controlar a raíz de la vacunación, así que si mi cabreo al ver los datos de las enfermedades emergentes ya era mayúsculo, imaginad a qué niveles llega si veo un “informe sarampión” que trata de tranquilizar a las familias que no vacunan y que encima dice que “es evidente también que no hay una sola visión ni una única manera de entender e interpretar las cosas, ya sea la manera de entender la enfermedad o la forma de interpretar unos datos epidemiológicos”, que viene a ser una manera de decir que sí, que la gráfica está clara, pero nosotros la interpretamos como nos da la gana para extraer argumentos que nos beneficien.

Por si acaso la página adolece de falta de actualización he decidido entrar en los foros, ya que los usuarios suelen ser más activos que los webmasters y mi segunda sorpresa es que es un foro muy minoritario, con apenas participaciones, que hablan muy poco de los brotes de sarampión y que lo poco que hablan no tiene ni pies ni cabeza.

Si antes tenía claro que mis hijos deben estar vacunados, después de entrar en la página web que debería convencerme de no hacerlo, aún tengo más claro que quiero vacunar a mis hijos y que todos los niños deberían vacunarse de las vacunas que nos ofrece el estado.

Foto | Fotomontaje realizado con imágenes de Zaldylmg y Lars Plougmann en Flickr
En Bebés y más | Por qué no vacunar a los niños hace peligrar la salud de todos, Por qué estar a favor de las vacunas infantiles, “Las vacunas son muy eficaces para prevenir las enfermedades”. Entrevista a Carlos González (I), “Los laboratorios ganan mucho más dinero haciendo jarabes para la tos, vitaminas y reconstituyentes que con las vacunas”. Entrevista a Carlos González (II), Vacunas sí, vacunas no y la cultura del miedo

Temas
Comentarios cerrados
Inicio