Tras algunas generaciones en las que la educación autoritaria se mostraba como el modelo imperante y después de algunos años en los que parece que ha reinado una educación rebote de la anterior, excesivamente permisiva, muchos padres, con ayuda de sus instintos y con el apoyo de literatura y de algunas evidencias científicas han decidido criar a sus hijos de un modo algo diferente al habitual que se conoce como crianza natural o crianza con apego.
La mayoría de los que seguimos esta corriente (me incluyo, porque creo que sigo sus principios) defendemos las mismas cosas: dormimos con nuestros hijos, nuestras mujeres amamantan de manera prolongada, preferimos llevar a los niños cerquita del cuerpo y no tanto en los cochecitos, defendemos el parto natural y tratamos de evitar cualquier tipo de castigo, ya sea físico o verbal, entre otras cosas.
Defendemos nuestro modo de criar como el mejor para los bebés, básicamente porque es el que utilizamos (sería absurdo decir que educamos a nuestros hijos, por elección, de la manera que creemos que no es la mejor), pero entendemos que maneras de criar a un niño hay cientos y que cada familia debe hacer su propia elección.
Se nos conoce por nuestros actos más que por nuestros principios y por este motivo escribo esta entrada, motivada por otras compañeras de otros blogs, que en su día se hicieron la misma pregunta: ¿existe un pack Crianza Natural: parto natural, colecho, no vacunas, porteo, lactancia a demanda, vegetarianismo, etc?
Sí, el pack existe…
Quiero que todas vosotras y vosotros nos ofrezcáis vuestra respuesta a la pregunta que planteo, pero como no puedo estarme callado, ofrezco mi respuesta para el debate y en otra entrada lo explicaré todo de manera más detallada.
Sí, el pack existe, o eso creo. En algunas ocasiones he leído en foros a madres diciendo “quiero practicar la crianza natural, pero no sé cómo”, “estoy intentando colechar, pero no nos sale”, “creo que no seré bien recibida, porque estoy dándole el biberón a mi hijo, ya que no pude darle el pecho como quería” y cosas similares que muestran que hay madres que piensan que criar con apego a su hijo significa marcar todas las casillas del listado que podéis ver arriba como imagen.
Yo no soy crianza-natural-practicante
Sabéis cuál es mi filosofía de crianza y mi modo de ver las cosas como padre y sabéis que podría marcar varias de las casillas del listado, sin embargo el concepto del pack es erróneo, a la vez que excluyente y en cierto modo pedante. Yo no soy crianza-natural-practicante en el sentido de la etiqueta. Es decir, sí sigo los principios por los que se rige este tipo de crianza, pero no es algo que yo vaya diciendo por ahí: “no, es que yo practico la crianza natural”, como si fuera un método, porque en el momento que se entiende como un método se transforma en algo que se hace para lograr un objetivo.
El que lleva a cabo un método está buscando un resultado y si a medida que se ejecuta se observa que los resultados no son favorables se duda del método o se cambia por otro, porque los métodos responden a unos objetivos y los objetivos, con el tiempo, deben ser evaluados.
Por eso digo que yo no practico nada ni marco casillas en ningún sitio, por eso no le digo a la gente “oye, podrías hacer la crianza natural, que igual te va bien” ni “prueba a crianzanaturalizar, que tus hijos saldrán mejor” y por eso creo que la gente que habla de la crianza con apego como un pack, como un método, se equivoca. Las cosas hay que hacerlas porque crees que tienen que ser así, no para conseguir algo.
¿De verdad hay gente que habla de un “pack”?
Pues sí y algunas lectoras de este blog lo han comentado en algunas ocasiones explicando anécdotas de madres que les han dicho cosas como “¿Tú no colechas? Entonces no eres de las mías”, “Si das biberón no puedes decir que haces crianza natural” o “Si le pones las vacunas no estás respetando a tu hijo”.
Comentarios de este tipo ayudan muy poco a los que de verdad luchamos por ofrecer al mundo una visión de la crianza en la que el niño no es malvado, no es un tirano, no es un controlador ni un oponente de los padres sino una persona en formación que quiere y requiere el contacto y el cariño de los padres para aprender de ellos cómo es el mundo en el que vive. Repito: con ellos y no contra ellos.
Digo que ayudan poco por una razón simple, la crianza natural no son una serie de ítems que hay que marcar para formar parte, no son unos requisitos que uno debe cumplir para formar parte de un club. La crianza natural es cumplir una premisa, sólo una. Una sola lista formada por una sola línea compuesta de una sola palabra: Respeto.
La crianza natural es respeto y nada más
El eje de la crianza natural es el respeto, porque la crianza natural no es más que eso: respetar a los niños y a sus necesidades, sus libertades y las nuestras y acompañarles en el camino para que elijan cómo vivir, pero siempre enseñándoles a devolver al mundo el mismo respeto que se les ha tenido a ellos y mostrándoles que los demás tienen el mismo derecho a ser libres.
De la lista que veis al inicio de la entrada, sólo sería capaz de marcar tres o cuatro de las líneas en cuanto a cumplimiento (aunque sí marcaría más en cuanto a filosofía) y hay madres que respetan profundamente a sus hijos que se quedarían quizás en dos. Incluso hay madres autoritarias o nada respetuosas capaces de marcarlas todas y que yo no consideraría compañera de fatigas (o con un pensamiento común en cuanto a crianza).
Por eso no debería existir un pack que te diga lo que practicas o dejas de practicar sino una filosofía muy simple, basada en respetar a los niños y a los demás en general.
Mañana seguimos con esta entrada para ofrecer la visión de la crianza natural en cada uno de los puntos de la lista.
Foto | Armando Bastida
En Bebés y más | La crianza natural, los consejos gratuitos y cómo evolucionan los padres que crían con apego (I) y (II), La crianza con apego (Attachment parenting), La teoría del apego de John Bowlby