Las normas de los comedores escolares son algo que cada día me asombran más. He estado repasando las que aparecen en la normativa del colegio de mi hijo y observando lo que sucede cada día.
Los niños deben comerse la comida del plato, sin posibilidad de elegir entre varios de calidad nutricional equivalente. No pueden levantarse y salir al baño. No acuden a lavarse las manos antes de comer. Normalmente deben permanecer en silencio o haciendo le menor ruido posible. No pueden repetir si no se han comido los tres platos. En serio, lo pone. Para repetir de garbanzos o filete se tienen que haber comido el postre.
Cuando los adultos comemos en un restaurante de menú o en el comedor del lugar de trabajo o de estudios nadie nos hace comer en silencio. Nos podemos levantar, ir al baño. Nadie nos asigna un sitio obligatorio e inmutable, nos sentamos con quien queramos. Desde luego podemos habitualmente elegir entre varios platos y tampoco es obligatorio comérselo todo si no nos gusta o no nos apetece. Desde luego nadie pretende que nos comamos la fruta antes de repetir de filete. Podemos quejarnos si la comida no está buena o si está helada cuando se la van a comer.
Los niños que usan el comedor reciben, se dice, una educación alimentaria y de hábitos nutricionales. Pero en esta educación se obliga a comer lo que no te gusta o no te apetece, a comerte todo lo que te ponen (o casi todo) , a sentarte con quien te manden, a estar callado, a no tener derecho a rechazar un plato o a guiarte por tu propio apetito. Ya quizá no te obligan a comerte las cosas tapándote la nariz, pero si con comentarios sutiles que hacen que deban ingerir algo contra sus deseos. Yo no creo que eso eduque para la alimentación correcta ni para la socialización.
Para terminar, los precios de los comedores escolares son realmente bajos comparados con la comida de cualquier restaurante o comedor comunitario. Y cuando pagas poco puedes exigir poco. Y menos aun si solo eres un niño y se presupone que no tienes capacidad de decisión ni eres capaz de confiar en tu apetito.
En Bebés y más | Comedores saludables, una web que asesora sobre la alimentación infantil en los colegios