Lactancia mixta: cómo conseguir que sea un éxito

Lactancia mixta: cómo conseguir que sea un éxito
Sin comentarios

La lactancia mixta es aquella que combina leche materna y leche artificial. La OMS recomienda lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida del bebé pero a veces no es posible.

Aunque los estudios indican que la mayoría de mujeres desea amamantar a sus bebés, las tasas de lactancia materna van disminuyendo con el paso del tiempo. Según datos de UNICEF, sólo dos de cada cinco niños reciben lactancia materna exclusiva durante seis meses.

Lactancia materna mixta: ¿decisión u "obligación"?

Algunas madres deciden realizar lactancia mixta porque desean que otra persona pueda dar un biberón al bebé y ellas puedan descansar. En estos casos, siempre recomiendo mantener las tomas de lactancia materna nocturnas, pues la prolactina, hormona fundamental para la producción de leche materna tiene su mayor secreción por la noche; las tomas nocturnas son fundamentales para garantizar la producción de leche materna.

He conocido casos también de madres que desean realizar lactancia mixta pues así saben lo que comen sus hijos cuando toman biberón. Aunque cualquier decisión materna es totalmente respetable, saber qué cantidad toma nuestro bebé es totalmente innecesario, pues existen medidas indirectas que indican si nuestro bebé está tomando suficiente leche.

Con cierta frecuencia la lactancia mixta se inicia cuando la madre se incorpora al trabajo. Desgraciadamente, la baja maternal de 16 semanas dificulta en la mayoría de los casos mantener la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida del bebé. Algunas madres no pueden extraerse leche materna, o no en la cantidad suficiente, y deciden pasar a una lactancia mixta: cuando la madre esté en casa amamantará al bebé y cuando se encuentre trabajando le darán fórmula.

Sin embargo, en la mayoría de los casos la lactancia mixta es "obligada", cuando un profesional sanitario pauta suplementos porque la madre no produce suficiente leche y/o el bebé no extrae toda la leche que necesita y no gana peso con normalidad. Los suplementos pueden ser de leche materna (es un mito que la leche de fórmula alimente más), en cuyo caso no estaríamos ante una lactancia mixta, o de fórmula artificial.

El fracaso de la lactancia mixta

En  muchas ocasiones, la lactancia materna fracasa y se convierte en lactancia artificial. Esto puede deberse a diferentes motivos (o a una combinación de varios).

  • No se soluciona la causa que llevó a pautar una lactancia mixta. En este caso hablamos de esas lactancias mixtas por "obligación", en las que un profesional sanitario pauta suplementos porque el bebé no está comiendo lo suficiente. Esto puede deberse a que la madre no produce suficiente leche y/o a que el bebé no es capaz de sacar toda la que necesita. La mayoría de mujeres somos perfectamente capaces de producir toda la leche materna que necesita nuestro bebé; los casos de hipogalactia primaria son raros, pero ante una necesidad de lactancia mixta hay que descartarlo. Las hipogalactias secundarias (la madre es capaz de producir leche, pero está produciendo menos de la que debería por alguna causa) son más frecuentes y puede deberse a un mal enganche, una técnica inadecuada (por ejemplo, horarios muy rígidos...). También puede suceder que el bebé tenga dificultad para extraer toda la leche que necesita: frenillo sublingual corto, hipotonía, retrognatia... Muchos de estos problemas tienen solución, pero si no actuamos sobre ellos, la producción y/o extracción de leche materna continuará siendo baja. Esto llevará en muchos casos a aumentar progresivamente la cantidad de fórmula y la lactancia pasará a ser casi exclusivamente artificial.
  • Del biberón sale más leche y más rápido. La alimentación con biberón es totalmente diferente de la lactancia materna. Cuando los bebés maman, sacan pequeñas cantidades de leche cada vez. Incluso hacia los tres meses tienen que estar mamando un par de segundos hasta que la leche empieza a fluir (crisis de los tres meses). En cambio, del biberón salen grandes cantidades de leche en poco tiempo. Esto puede hacer que algunos bebés se impacienten con el pecho y acaben prefiriendo el biberón.
  • Confusión tetina- pezón. La forma de succionar del pecho es totalmente diferente de la forma de succionar del biberón. En el primer caso, el bebé debe colocar la lengua debajo del pezón y la areola, hacer buen sello con los labios y realizar movimientos peristálticos con la lengua para bombear la leche. En el caso del biberón, en cambio, la succión es diferente y la leche sale con más facilidad. Aunque no sucede en todos los casos, algunos bebés podrían confundirse, y tratar de succionar del pecho como lo harían el biberón; con el consiguiente enfado porque la leche, así, no va a salir.

Cómo lograr una lactancia mixta de éxito

lactancia-mixta

Acabamos de ver la principales razones que llevan a un fracaso de la lactancia mixta, así que vamos a ver ahora qué tenemos que hacer para conseguir que la lactancia materna sea un éxito.

  • Solucionar los posibles problemas que no permiten realizar lactancia materna exclusiva. En el caso de que tengamos que dar suplementos porque nuestro bebé no crece de manera adecuada, es fundamental que, aunque se los demos para garantizar su correcto crecimiento, identifiquemos los posibles problemas y trabajemos para solucionarlos. Salvo los casos de hipogalactia primaria (raros), la mayoría de los otros problemas pueden resolverse. Es fundamental asegurar que la técnica es la adecuada (lactancia materna a demanda, siempre que el bebé quiera y durante el tiempo que desee) y que el enganche sea bueno. También es importante que un profesional formado en lactancia materna explore a nuestro bebé para detectar posibles problemas: frenillo sublingual corto, hipotonía... A veces variar de postura ayuda, pues los bebés se enganchan y extraen la leche mejor en unas que en otras
  • Ofrecer el pecho primero. Salvo contadas excepciones, lo ideal es que le ofrezcamos siempre primero el pecho. El bebé tendrá hambre y succionará con energía. Posteriormente ofreceremos el suplemento sin forzar, pues los bebés regulan perfectamente sus sensaciones de hambre y saciedad y puede que no quieran acabárselo todo. Tras el suplemento podemos volver a ofrecer el pecho. Sabemos que el pecho no es sólo nutrición sino también confort, cariño, vínculo. Además, tendrá un "extra" de estímulo para aumentar la producción de leche materna.
  • Encontrar el método de suplementación adecuado. Los suplementos no tienen por qué ofrecerse siempre en biberón. Hay muchos otros métodos que pueden resultar más adecuados. Por ejemplo, en bebés muy pequeños que tomen cantidades pequeñas podemos ofrecerles la leche con dedo y jeringa (método llamado "finger feeding"). También pueden tomar la leche en vasito (incluso hay algunos destinados para este fin). En aquellos bebés que se enganchen bien al pecho pero no tomen suficiente leche podemos usar un relactador. Por ´último, en el caso de decidirnos por el biberón recomiendo que se dé con la técnica Kassig.

¿Puede volverse a lactancia materna exclusiva si hemos iniciado una lactancia mixta?

lactancia-mixta

S´í, rotundamente sí. De hecho, cuando la lactancia mixta es porque nos han pautado suplementos porque el bebé no crecía lo suficiente, el objetivo debe ser volver a lograr una lactancia materna exclusiva. Para ello debemos solucionar el problema que nos llevó a la lactancia mixta: mal enganche del bebé al pecho, malas pautas de lactancia, dificultades del bebé para extraer la leche...

Lactancia mixta y vuelta al trabajo

Este es un caso particular de lactancia mixta por lo que merece la pena dedicarle un apartado diferenciado. La lactancia mixta en este caso se inicia generalmente a partir de los cuatro meses.

A estas edades, la lactancia materna está ya perfectamente establecida por lo que será muy raro que exista confusión tetina-pezón o que los bebés acaben prefiriendo el biberón; más bien al revés, probablemente les cueste tomar el biberón.

Muchas mamás preguntan si su producción de leche se verá disminuida; es muy improbable, ya que la lactancia materna está más que establecida a esas edades y la mayor parte de la leche se produce durante la toma. Si no os extraéis leche durante la jornada laboral es probable que notéis el pecho muy lleno los primeros días, luego se irá normalizando. El pecho es capaz de adaptarse a la demanda perfectamente.

Temas
Comentarios cerrados
Inicio