Desde hace un tiempo España se suma a la tendencia de otros países en buscar alternativas a la leche de vaca y utilizar otros tipos de leche como la leche de arroz, de avena, de soja o de cabra. Esta última supone una vuelta a lo natural y a lo rural. Seguro que muchos de nuestros padres y abuelos crecieron con la leche de cabra como parte de su dieta principal.
La producción de leche de cabra ha vuelto a resurgir gracias a la aparición de nuevos productos en el mercado europeo que buscan una composición nutricional más saludable y equilibrada. Productos como yogures, quesos o fórmulas infantiles para bebés a base de leche de cabra cada vez son más utilizados en nuestra alimentación.
A partir de que en 2013, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) aprobara la comercialización en Europa de fórmulas infantiles a base de leche de cabra, el interés de profesionales médicos y padres en este tipo de productos ha ido en ascenso. Un claro ejemplo es la fórmula infantil Capricare, única elaborada a base de leche entera de cabra, que se ha convertido en un referente para pediatras y padres que buscan productos que aporten los beneficios nutritivos de la leche de cabra.
Pero, ¿qué diferencias aporta realmente la leche de cabra?
Las propiedades y beneficios de la leche de cabra han sido demostrados en numerosos estudios clínicos.
Es más digestiva. Las proteínas de la leche de cabra se digieren más fácilmente que las proteínas de otras leches, como la leche de vaca. Esto se debe a que la leche de cabra permite que las enzimas digestivas la desgranen mejor, ayudando a la digestión.
Ayuda a aliviar el estreñimiento leve. Los ácidos grasos naturales presentes en la leche de cabra facilitan una mejor absorción permitiendo unas heces menos duras y por tanto más fáciles de expulsar.
Tiene menor carga alergénica que la leche de vaca . La leche de cabra contiene menos cantidad de Alfa S1 Caseína, uno de los principales alérgenos causantes de la APLV (Alergia a la Proteína de la Leche de Vaca). Esto no significa, en ningún caso, que los bebés que padecen APLV puedan ingerir fórmula infantil elaborada a base de cabra, al contener igualmente Alfa S1 Caseína.
- Se segrega por un proceso más similar a la leche materna que la leche de vaca. A diferencia de ésta, la leche de cabra se segrega por un proceso similar a la leche materna denominado secreción “apocrina”, que aporta más componentes celulares, como nucleótidos y aminoácidos libres.
Otras propiedades
Además, la leche de cabra contiene micronutrientes predominantes que mejoran su valor nutritivo con respecto a la leche de vaca, como vitaminas A, B2, B3 y D; y minerales como fósforo, magnesio y potasio. La vitamina A, por ejemplo, es fundamental para el desarrollo de la visión y el inmunológico. La leche de cabra es también rica en calcio, que es absorbido mejor en combinación con la vitamina D, siendo ambos elementos esenciales para el desarrollo y mantenimiento de los huesos y dientes.