Con mi primer hijo y las dificultades que tenía para dormir compré el libro “Duérmete, niño” del Dr. Estivill decidida a aplicar al pie de la letra el método. Confieso que no tuve las fuerzas suficientes ni corazón para aplicarlo. Cuando Lucas cumplió tres años, le eduque a dormir mediante el método de economía de fichas. Ahora con mi pequeñín Arturo aplico lo que he llamado el trío chupete-Mozart-brazos de mamá/papá/o la tía, cuando el sueño llega, pero se resiste a quedarse, le damos el chupete, lo acunamos en los brazos mientras suena de fondo la música de Mozart. Arturo no se resiste. En mi caso quien manda es mi corazón por muy cansada que esté.
En otros casos, a muchos padres el Método Estivill les ha dado bueno resultados como hemos comprobado en lo comentarios del post "Duermete, niño ¿el fin justifica el medio?" donde ha surgido un interesante debate entre seguidores y detractores del famoso método.
En relación a la polémica que genera el Dr. Estivill en Zona Pediátrica hay colgado un video realizado con la colaboración de los usuarios, que según la psicóloga María Paula Cavana es una clara adhesión al Método Estivill, y ella como detractora ha hecho un interesante análisis frase por frase del video que puede leerse en el blog Cozybebé.
Vale la pena leerlo.