La alimentación complementaria es un viaje individual y muy diferente para cada bebé y familia. No es solo un paso en el crecimiento del pequeño, sino una oportunidad para cultivar hábitos alimenticios positivos que perduren toda la vida. Aunque, para algunas familias, el inicio de esta etapa se traduce en un exceso de información y mucha confusión entre los posibles accesorios que comprar...
¿Qué es útil de verdad? ¿Qué no puede faltar? A continuación te damos las claves sobre la alimentación complementaria que te permitirán iniciar esta etapa con total seguridad y te recomendamos los accesorios y productos más útiles para que la transición a la mesa sea un camino de rosas.
Breve guía sobre la alimentación complementaria
La alimentación complementaria (AC) representa un hito crucial en el desarrollo de un bebé, marcando el comienzo de una nueva fase en su vida nutricional, así como en su desarrollo psicomotor. Es el proceso mediante el cual se introducen alimentos sólidos o líquidos distintos de la leche materna o fórmula infantil, complementando, pero nunca sustituyendo, estas fuentes vitales de nutrición.
Entender cuándo y cómo iniciar este proceso es fundamental para el bienestar y crecimiento adecuado del bebé. Esto es lo que necesitas saber.
¿Cuándo empezar con la AC?
La recomendación unánime es apostar por la lactancia materna o artificial exclusiva durante los primeros 6 meses. A partir de entonces, se inicia gradualmente la AC, manteniendo la lactancia a demanda al menos hasta el año y hasta cuando madre e hijo deseen.
En este sentido, es crucial esperar a que el bebé muestre señales de estar listo:
- Desaparición del reflejo de extrusión (expulsión refleja de alimentos no líquidos con la lengua).
- Interés activo por la comida.
- Capacidad de mantenerse sentado solo.
- Capacidad para coger alimentos con las manos.
- Habilidad de coger comida con la mano y llevársela a la boca.
La AC nunca debe comenzar antes del cuarto mes para evitar riesgos como atragantamiento y sustitución de tomas de leche por alimentos menos nutritivos a esta edad. Por otro lado, retrasarla más allá de las 26 semanas puede llevar a problemas nutricionales y dificultades en la aceptación de nuevos sabores y texturas.
¿Qué alimentos introducir y en qué orden?
No existe una pauta rígida para los alimentos a introducir, ya que varían según culturas y costumbres familiares. Sin embargo, se sugiere iniciarla con alimentos ricos en hierro y zinc y presentarlos uno a uno, observando la aceptación del bebé. Es esencial evitar la adición de sal, azúcar o edulcorantes para acostumbrar al bebé a los sabores naturales de los alimentos.
Además, se recomienda ofrecer una variedad de frutas enteras, verduras, cereales integrales y alimentos ricos en proteínas para una dieta equilibrada.
Eso sí, hay que evitar el consumo de pescados grandes –como el emperador, el pez espada, el atún rojo, el cazón y el lucio–, verduras de hoja verde –como las acelgas, las espinacas o las borrajas–, y cereales azucarados.
Acostumbrarlo a las texturas
Además, la introducción progresiva de texturas es esencial para evitar problemas de alimentación a largo plazo. Se puede comenzar con texturas grumosas y semisólidas antes de los 8-9 meses o directamente con sólidos, presentados adecuadamente siguiendo métodos como el Baby Led-Weaning (BLW). Según esta metodología, cada día más extendida y recomendada, los alimentos se ofrecen en trozos, no triturados, y es el propio bebé el que los coge con su mano, se los lleva a la boca y decide cuánto come.
Una ayuda imprescindible
En este sentido, la marca francesa Béaba, referente en el sector de la alimentación infantil desde 1989, ofrece a las familias diversas opciones en cuanto a los accesorios necesarios para empezar a ofrecer comida a sus bebés de forma saludable, práctica y fácil. ¿Cómo? Con productos innovadores fabricados con materiales saludables como el vidrio y el acero inoxidable para ofrecer lo mejor al bebé.
¿Un ejemplo? La silicona suave y flexible con la que Béaba fabrica el menaje y los accesorios para bebé ideales para esta etapa de diversificación alimentaria. De origen natural, resistente a altas temperaturas, flexible e irrompible, no transfiere olor, color ni sabor a los alimentos y limita la proliferación de bacterias. Además, es apta para microondas y lavavajillas y no contiene ftalatos ni BPA.
Trucos que facilitan el día a día
Para aquellas familias a las que les preocupa especialmente ofrecer a sus bebés alimentos y recetas sanas, el robot de cocina Babycook Neo de Béaba será el aliado perfecto. Es ideal para preparar elaboraciones dulces y saladas para el bebé de forma rápida y sencilla, preservando los beneficios nutricionales de cada alimento, así como su sabor y aroma, gracias a su sistema patentado de cocción al vapor suave.
Fabricado con materiales sostenibles e inocuos, cocina al vapor, tritura, descongela y calienta, con una capacidad de 1000 ml para preparar 4 porciones de 250g. Fabricado con vidrio y acero inoxidable, es muy fácil de usar y cuenta con una cuchilla con dos niveles, para una mezcla homogénea que permita adaptar la textura a cada etapa en la introducción de alimentos: liso, molido o picado.
Además, en línea con la creciente preocupación por el medio ambiente, el modelo Neo del robot de cocina Babycook cuenta con un diseño ecológico que consume un 50% menos de agua y energía que anteriores modelos. Y, para almacenar las recetas que se vayan preparando en cómodas porciones, sus tarritos de conservación de vidrio con cierre hermético de silicona resultan de lo más prácticos.
El menaje infantil ideal para empezar la AC
La teoría es una cosa y la práctica es otra bien diferente. Por eso, quienes han pasado ya por esa etapa saben que implica otras cosas que no vienen el en manual de instrucciones del pediatra. Por ejemplo, la suciedad y un cierto caos con los alimentos y accesorios en la mesa. O la falta de interés de algunos bebés a los que al principio les cuesta arrancar...
Para lidiar con todo ello, además de armarse de paciencia para ofrecer los alimentos y que el bebé los manipule y pruebe si le apetece, conviene hacerse con los accesorios de menaje de Béaba, que ayudarán a marcar la diferencia.
- Vajillas antideslizantes: puesto que es importante permitir al bebé que adquiera un papel activo en la comida, platos y cuencos de silicona con ventosas en la base como los de Béaba resultarán muy prácticos para evitar que los alimentos acaben en el suelo a la primera de cambio. Esto permitirá también que los padres puedan mantener una actitud expectante, pero que les permita disfrutar de la comida en familia en lo posible.
- Platos compartimentados: los platos de silicona con compartimentos de Béaba son una buena inversión para las familias que practican BLW o que han empezado a ofrecer diferentes texturas a su bebé porque permite separarlas. Así, nos permiten ofrecer diferentes alimentos en cada uno de sus compartimentos para que todo conserve su sabor y textura particular, de forma que el bebé pueda apreciarlo, fomentando además el desarrollo de la psicomotricidad del bebé al manipular él mismo cada alimento. Además, todos incluyen ventosa para evitar que la comida acaben en el suelo en un descuido.
- Cucharas: antes de lo que te esperas, tu bebé estará familiarizado con los cubiertos si se los dejas a su alcance y permites que experimente con ellos. Por ejemplo, estas cucharas de silicona suave y flexible de Béaba, perfectas para no irritar las encías del bebé y con con punta fina para adaptarse mejor a la forma de su boca. Son idóneas también para los adultos que deseen dar la comida a sus bebés.
Béaba fue la primera marca en lanzar las cucharas de silicona para bebés hace 20 años y desde entonces han acompañado las primeras comidas de los peques de muchísimas familias. Su material es respetuoso con la boca de los bebés y el nuevo modelo está fabricado en silicona mate para evitar manchas.
Para que aprendan a beber solitos
Con el inicio de la alimentación complementaria también debemos empezar a introducir el agua en la dieta del bebé. Las mejores opciones son las tazas de aprendizaje, como las de Béaba, ideales para fomentar su autonomía porque cuentan con dos asas anchas y una tapa con un boquilla de flujo antigoteo para poder llevarla en las salidas o al cole. Fabricada con silicona suave, su diseño es evolutivo, ya que sirve como taza de aprendizaje, pero también como vasito con asas.
También son útiles los vasos de silicona, fáciles de sujetar y con un diseño pensado para que aprendan a manejar los de los mayores. Elaborados con silicona, son flexibles e irrompibles, con una medida perfecta para que los cojan solitos y una textura antideslizante para que no se resbalen, incluso cuando están mojado.
La trona que no debe faltar en casa
Contar con una trona es imprescindible a partir de los 6 meses –o de cuando el bebé se sabe mantener sentado– para permitir que participe en las comidas familiares. Para ello, la trona Evosit de Childhome –marca del mismo grupo que Béaba– cumple con todos los requisitos para empezar la diversificación alimentaria: respaldo recto (90º), bandeja a una altura adecuada –a la altura del pecho o por debajo– y, reposapiés ajustable.
Además, la nueva Evosit es una inversión inteligente, ya que crece con el niño: que se puede utilizar desde el nacimiento –adquiriendo la hamaca para recién nacido– y durante toda la vida, hasta los 85kg. Su diseño práctico permite adaptar el asiento, el reposapiés, la barra de seguridad y la bandeja sin necesidad de herramientas.
Con un nuevo y bonito diseño en madera de haya, los tornillos ocultos proporcionan un aspecto limpio y de calidad a esta trona, que incorpora un arnés de 5 puntos y asa para transportarla fácilmente.
La ayuda de este tipo de accesorios con la que los padres contamos hoy en día, sin duda, facilita mucho este proceso que a veces puede hacerse cuesta arriba. Sumada a claves como respetar las señales del bebé, ofrecer una variedad de alimentos saludables y texturas y potenciar una alimentación consciente –sin forzar ni distraer–, ayudará a las familias a garantizar una transición gradual y agradable hacia una dieta saludable para sus pequeños en el futuro. Por fin... ¡todos a la mesa!