Un dato que no merece discusión es la poca predisposición que tienen los niños a comer fruta, la realidad es que comen poca, en cambio les encanta beberla. Para muchos niños una práctica solución es tomar zumos, es la mejor manera de poder proporcionar a su organismo los nutrientes necesarios que contienen las frutas.
Como dice el dicho, si no puedes con el enemigo, únete a él, si el niño prefiere el zumo, es interesante aprovecharse de esta opción para que su consumo vitamínico sea más elevado. Las frutas son grandes aliadas de la salud, aunque sean exprimidas. Claro que en todo momento nos estamos refiriendo a los zumos de frutas naturales.
Cuando se exprime una determinada fruta, una naranja, una mandarina, etc., se suele perder parte del aporte en fibra que la fruta proporciona, nosotros podemos suplir esta fibra a través de otros alimentos, igualmente, el zumo aportará diversas sustancias como minerales, proteínas o vitaminas muy adecuados para el desarrollo del pequeño. En especial, son interesantes los zumos elaborados con cítricos, ya que aportan al organismo grandes cantidades de vitamina C ideales para combatir algunas enfermedades o para propiciar el crecimiento. Como todos los cítricos no son iguales, una excelente opción es combinar distintas frutas al elaborar el zumo.
Con la llegada del frío, un aporte vitamínico extra permitirá a tu pequeño mantenerse en un buen estado de salud. Recuerda que los excesos son también perjudiciales, así lo explicábamos en el post Zumos, sus consecuencias en la salud de tu bebé.
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