Muchos padres compramos artículos para nuestros bebés en Ikea porque son bonitos y baratos. Pero atención si has comprado entre los meses de enero y febrero la trona de tinte envejecido de la línea Gulliver.
Tras la denuncia de una consumidora alemana que advirtió sobre sus riesgos, la tienda sueca ha decidido retirar las sillas de la venta en toda Europa. Aunque en España no se han recibido reclamaciones, será retirada una partida de 549 sillas para bebés por un defecto en la barra de arnés.
El defecto es un fallo en el montaje de la barra de arnés que impide que el bebé se resbale, y que si se suelta podría resultar peligroso. Debajo del asiento de las tronas figura una etiqueta con un código. Las sillas afectadas llevan los siguientes: 0801, 0802, 0803, 0804, 0805, 0806, 0807 ó 0808 y están fabricadas por el proveedor número 13755.
Así que si has adquirido ultimamente alguna que lleve estos códigos debes devolverla en la tienda a partir del 10 de marzo donde te entregarán una nueva, sin defectos.
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