¿Qué significa 'ser fuerte'? ¿Es posible cultivar la fortaleza mental? Claro que las personas mentalmente fuertes no son superhéroes. Tampoco son inmunes a las emociones o situaciones difíciles de la vida, ni tienen una varita mágica para evitar o solucionar los problemas.
Lo que realmente las distingue es su capacidad para evitar ciertos errores que sabotean el bienestar emocional y mental. En este artículo hablamos de estos errores habituales y de cómo tú también puedes aprender a gestionarlos a través de ejemplos prácticos; porque la fortaleza mental no es un don, sino una habilidad que puedes cultivar.
1) No se quedan ancladas en el "¿por qué?"
Las personas mentalmente fuertes saben que, aunque no siempre tienen control sobre lo que les pasa, sí tienen poder sobre cómo responden. Y aunque se puedan cuestionar las cosas, o buscar el por qué a lo que les pasa (y es algo muy sano hacerlo), no se quedan atrapadas en pensamientos como "¿Por qué a mí?".
Así, en lugar de ello, optan por preguntas más constructivas como "¿Qué puedo aprender de esto?" (aunque a veces no se aprenda nada, y no pasa nada). Por ejemplo, imagina que te despiden del trabajo. Puedes autocompadecerte, sí, pero no te quedas instalado ahí eternamente.
En lugar de ello, reflexionas sobre qué oportunidades nuevas se abren ahora o qué habilidades puedes desarrollar. Y ojo, que aquí no se trata de ignorar el dolor; debes validarlo, pero no dejar que te consuma.
- ¿Qué aprender aquí? La resiliencia empieza cuando dejamos de preguntarnos por qué y empezamos a preguntarnos para qué.
2) No buscan gustar a todo el mundo
¿Sabías que intentar gustar a todos es una batalla perdida? Las personas mentalmente fuertes lo tienen claro: no todos estarán de acuerdo con ellos, y eso está bien. Saben que decir "no" es una forma de proteger su tiempo, energía y bienestar.
Un ejemplo clásico: tienes un fin de semana libre y alguien te pide ayuda con algo que te desborda. En lugar de sentirte culpable por rechazarlo, podrías priorizar lo que realmente necesitas, ya sea descansar o dedicar tiempo a tus propios proyectos o hobbies.
- ¿Qué aprender aquí? Decir "no" a los demás no significa ser egoísta; significa decir "sí" a ti mismo.
3) No se resisten al cambio: lo integran como parte de la vida
Para los mentalmente fuertes, el cambio no es un enemigo, sino una oportunidad para crecer. Aunque el cambio da miedo, y es normal, saben que quedarse en la zona de confort puede ser más perjudicial a largo plazo.
Por ejemplo, supongamos que llevas años en una relación que no te hace feliz, pero el miedo a la soledad te paraliza. Las personas mentalmente fuertes enfrentan ese miedo y toman decisiones difíciles, porque entienden que aferrarse a lo conocido puede ser una trampa.
- ¿Qué aprender aquí? Aceptar el cambio es aceptar la vida misma, con todos sus altibajos.
4) No dejan que el miedo al fracaso las paralice
El fracaso no es el fin del camino; es parte del proceso. Las personas mentalmente fuertes no ven los errores como fracasos definitivos, sino como lecciones.
Por ejemplo, imagina que intentas emprender un negocio y no funciona. En lugar de verlo como una derrota, puedes analizar qué salió mal y usarlo como base para tu próximo intento. Cada tropiezo es una oportunidad para ajustar tu forma de hacer las cosas.
- ¿Qué aprender aquí? El fracaso no es lo contrario del éxito; es un peldaño más hacia él.
5) No se comparan a todas horas con los demás
En el mundo de las redes sociales, es fácil caer en la trampa de compararte con la "vida perfecta" de otros. Pero las personas mentalmente fuertes entienden que las comparaciones son ladrones de felicidad.
Así, en lugar de pensar: "Mira todo lo que él tiene y yo no", optan por reflexionar: "¿Qué quiero en mi vida? ¿Qué estoy haciendo para lograrlo? ¿Qué me ayudaría?..." Es decir, se centran en su propio progreso y celebran sus logros y avances, por pequeños que sean.
- ¿Qué aprender aquí? Compararte con otros, aunque a veces es inevitable, te aleja de tu camino; compárate contigo mismo para avanzar, o si te comparas con otros, que sea para inspirarte y mejorar, no para torturarte.
6) No se obsesionan con controlarlo todo
Las personas mentalmente fuertes saben que no pueden controlarlo todo, pero sí pueden gestionar su respuesta a las situaciones. Esto les permite enfocarse en lo que realmente importa.
Por ejemplo, si estás atrapado en un atasco, puedes frustrarte o aprovechar ese momento para escuchar un buen podcast o simplemente respirar profundamente. No es lo que pasa, sino cómo lo gestionas.
- ¿Qué aprender aquí? Dejar ir lo que no puedes controlar y enfocarte en lo que sí está en tus manos es un paso hacia tu bienestar.
7) No dejan de cuidar sus vínculos
Finalmente, otra clave esencial para la fortaleza mental es elegir bien con quién compartes tu energía. Las personas mentalmente fuertes no permiten que las relaciones tóxicas las desgasten. Si alguien en su vida constantemente las menosprecia o las hace sentir mal, ponen límites o se alejan.
Por ejemplo, si un amigo siempre critica tus decisiones o te hace dudar de ti mismo, podrías confrontarlo con asertividad o, si es necesario, tomar distancia.
- ¿Qué aprender aquí? Las relaciones que te drenan no son un hogar; busca vínculos que te inspiren, te hagan crecer y te reporten bienestar.
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