Por más que inventen nuevos artilugios creo que todavía se piensa poco en el confort y la seguridad de los bebés en los aviones.
Con eso de que hasta los dos años no tienen derecho a un asiento y deben viajar en brazos de sus padres se crean artículos como Flye Baby, una hamaca para viajar en avión con el bebé, con el fin de hacer el viaje un poco más placentero para todos.
Consiste en una hamaca de tela que se engancha a la bandeja del asiento de adelante. Tiene tiras para sujetar al bebé y el niño queda tumbado mirando hacia los padres, lo cual es ideal para la hora de comer, para jugar o simplemente para distraerlo un rato.
Sin embargo, al no estar homologada como cinturón de seguridad no se permite usar en el despegue ni en el aterrizaje.
Es para bebés de hasta 12 kilos, pero no sólo está pensada para viajes en avión, también para sillas de playa o como adaptador para sillas normales.
A mí para el avión no me acaba de convencer por dos cosas. Primero, porque no la encuentro muy segura y segundo que para usarla debe estar el asiento de adelante sin reclinar.
Su precio tampoco me convence si no se le va a dar otro uso, a no ser que se viaje frecuentemente con el bebé. Cuesta unos 37 euros al cambio más los gastos de envío.
Vía | Compradicción
Más información | Flye Baby
