De tanto en tanto os traemos al blog temas relacionados con los derechos de los niños, y es que siempre viene bien recordarlos (o descubrirlos). Este sencillo cartel sobre los derechos de los niños, que os animamos a compartir, es de Unicef Chile y me ha gustado por su claridad.
Concisión y claridad, pues junto a los diez derechos básicos resumidos encontramos los iconos que representan cada idea de una manera precisa y gráfica. Hoy queremos destacar el derecho número seis, el derecho a una familia, que aunque en el dibujo aparece como una familia convencional, debería hacerse extensivo a cualquier tipo de familia.
El derecho de los niños y las niñas a la convivencia familiar supone que la familia representa un entorno positivo para el desarrollo de los pequeños. Esa es la razón de que la Convención sobre los Derechos del Niño establezca para los padres un conjunto de responsabilidades para proteger el desarrollo de sus hijos.
También se señala que los Estados deben tomar medidas para apoyar a los padres en su tarea de orientación, promoción del desarrollo y cuidado de los niños y niñas, algo que es menos notable en nuestro entorno (o al menos no se percibe más allá de las visitas al pediatra establecidas, que puede que nos ayuden y orienten mucho, o puede que no).
En la actualidad, hay muchos tipos de familias que pueden parecerse o no a la representada esquemáticamente por el dibujo en el cartel: una madre, un padre y un niño. Hay familias monoparentales y familias homoparentales, familias reconstituidas, hijos nacidos dentro del matrimonio y fuera de él (cada vez más), niños adoptados, acogidos, familias numerosas...
El caso es que se respete el derecho básico del niño a esa familia que lo cuide y lo quiera. Son buenas señales que en muchos países (como leemos que sucede en Chile) existan más niños que conviven con sus familias y menos que permanecen internados en instituciones.
Pero no son buenas noticias los datos referidos a la violencia familiar, la dolorosa realidad del maltrato infantil que afecta a un importante número de familias, sin importar el tipo de estructura familiar.
En definitiva, el "derecho número seis", el de tener una familia, donde se pueden englobar múltiples tipos de familias, puede garantizar muchos de los otros derechos, y así debería ser. Pero cuando esa familia o la ausencia de familia atenta contra los derechos de los niños, estos quedan desprotegidos, y hay que actuar.
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