En cuántas ocasiones hemos oído decir que un niño será tan alto como su padre, siempre hemos asociado la genética con la altura que podrá tener un niño. Pues bien, un estudio de la OMS (Organización Mundial de la Salud), proporciona la orientación adecuada para que cualquier niño de cualquier país, puedan crecer adecuadamente independientemente de la raza que sea o de los valores genéticos que posea.
El lugar de nacimiento, la raza o el peso genético no son tan importantes a la hora de crecer como lo es una adecuada alimentación y unos cuidados óptimos, todos pueden desarrollarse de igual forma en el momento que se cumplen las dos normas básicas, buena alimentación y adecuados cuidados. El nuevo patrón internacional de crecimiento así lo desvela y nos muestra datos de interés sobre la manera adecuada de crecimiento. Gracias al estudio iniciado en 1997 por la OMS en el que participaron 8.000 niños con unas condiciones óptimas de crecimiento, hoy podemos ver los sorprendentes resultados que indican si pesa más la genética o la buena alimentación y los cuidados.
Sin duda el estilo de vida es fundamental e incide en un adecuado desarrollo, aunque tal y como están las cosas en el mundo, conseguir que todos se desarrollen adecuadamente es hoy por hoy una tarea titánica por la falta de colaboración, los problemas políticos, etc., pero ahí está el estudio en el que se demuestra que una buena nutrición y un adecuado cuidado influyen en el crecimiento mucho más que los genes.
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