No es la primera ni será la última vez que repitamos la advertencia que una gota de alcohol es demasiado durante la gestación.
De todas formas, los estudios sugieren que la mitad de las mujeres consumen alcohol en las primeras semanas de gestación, pero la mayoría lo deja una vez que descubre que está embarazada. Lo que aún falta por determinar es la relación entre el momento en que se deja de consumir alcohol al principio del embarazo y el riesgo de aborto espontáneo.
Investigadores del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt (Canadá) han comprobado que cada semana que una mujer consume alcohol durante las primeras cinco a diez semanas de embarazo se asocia con un incremento del ocho por ciento en el riesgo de aborto. Otra razón potente para abstenerse de consumirlo.
Ninguna cantidad de alcohol es segura
Los resultados, publicados en la revista americana de Obstetricia y Ginecología (American Journal of Obstetrics and Gynecology), son resultado de analizar el momento, la cantidad y el tipo de consumo de alcohol durante el embarazo y cómo estos factores se relacionan con el riesgo de aborto espontáneo antes de las 20 semanas de gestación.
La mayoría de las mujeres abandonan el hábito de beber tras una prueba de embarazo positiva, pero el consumo de alcohol antes de descubrirlo es común, tanto entre las que han planificado su gestación como entre las que no lo han hecho. La mitad de las 5.353 mujeres incluidas en el análisis señalaron haber bebido antes de la concepción y durante las primeras semanas de embarazo. La edad gestacional media en la que dejaron de beber alcohol fue de 29 días.
Según este estudio, el impacto del consumo de alcohol aumenta hasta la novena semana de embarazo, y el riesgo se acumula con independencia de que la mujer haya tomado una copa o más de cuatro a la semana. Tampoco influye el tipo de alcohol consumido ni el grado de alcoholismo alcanzado.
Katherine Hartmann, vicepresidenta de Integración de la Investigación en esta universidad canadiense señala:
"Abstenerse del alcohol alrededor de la concepción o durante el embarazo se aconseja desde hace mucho tiempo por diferentes razones, incluyendo la prevención del síndrome de alcoholismo fetal. No obstante, los niveles modestos de consumo a menudo se consideran seguros".
Los costes emocionales de un aborto
Según los investigadores, uno de cada seis embarazos reconocidos termina en un aborto espontáneo, lo que conlleva un gran coste emocional y deja sin respuesta las preguntas sobre el motivo del aborto.
Biológicamente, se sabe poco acerca de cómo el alcohol afecta al principio del embarazo, pero puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo al modificar los patrones hormonales, alterar la calidad de la implantación, aumentar el estrés oxidativo o perjudicar vías clave.
Beber alcohol es más común en las primeras semanas de gestación –cuando el embrión se desarrolla más rápidamente y empiezan a formarse los órganos–, por lo que es importante entender la relación entre el tiempo de consumo y el riesgo que implica.
Alex Sundermann, autora principal del estudio y recién graduada en el Programa de Entrenamiento de Científicos Médicos de la Universidad de Vanderbilt, señala que la muestra es muy grande, proviene de zonas de Estados Unidos muy diversas y evalúa datos en las primeras etapas del embarazo con técnicas analíticas más avanzadas que los estudios anteriores.
De ahí, la relevancia de sus conclusiones. Los investigadores insisten en la importancia de realizar un test de embarazo en cuanto se detecte una falta en la menstruación para dejar de consumir alcohol cuanto antes y así reducir el riesgo de aborto asociado a su consumo.
Vía | Vanderbilt University Medical Center
Fotos | iStock
En Bebés y Más | Beber alcohol en cantidades moderadas a altas durante el embarazo altera los genes de los bebés, Abstinencia total de alcohol durante el embarazo: el estudio más grande hasta la fecha confirma importantes riesgos para el bebé