Después de que una mujer dé a luz a un bebé, y de hecho antes de que lo haga también, debería tratar de llevar una dieta equilibrada, constituida por alimentos sanos, de calidad y evitando alimentos con demasiado azúcar, por considerarse que llevan muchas calorías para los pocos nutrientes que aportan.
Esta es la dieta que se podría recomendar a las mujeres que acaban de tener un bebé y que no amamantan, pero también para aquellas que deciden hacerlo. Dicho de otro modo, la dieta que se recomienda para las mujeres lactantes es exactamente la misma que se recomienda para las mujeres que no amamantan, y es también la misma que se recomienda para los padres de la criatura, y para los abuelos, y para la abuela, madre de la madre que amamanta, o suegra, o madre del marido de la mujer que amamanta o no lo hace.
Pero qué follón, ¿no? Pues sí, es un poco follón, pero al final es muy simple: las mujeres que dan el pecho no tienen que hacer una dieta especial, así que no entiendo por qué hay tanta información tratando de explicar cuál es la nueva dieta que debe llevar una mujer que da el pecho, como si tuviera que hacer no sé cuántos sacrificios en términos de dieta y limitaciones por el hecho de decidir amamantar.
La dieta recomendable para toda persona que vive y respira
Esta literatura de la que hablo, o incluso los mensajes que ofrecen los pediatras y otros profesionales, que dicen eso de "mamá, cuídate, come bien, que ahora estás amamantando", es lógica, pero puede ser contraproducente. Se les dice que no tomen coca-cola, que no beban alcohol, que coman alimentos sanos, que no abusen de alimentos ricos en mercurio, que los hidratos sean integrales, mejor que refinados, que tomen un par de raciones de lácteos al día, pero no más, porque la leche es un alimento más, que coman verdura a diario, si puede ser en más de una ocasión y contando con verduras crudas y que coman fruta también a diario.
El problema es que sólo se les dice a ellas, a las que dan el pecho, y a las que no dan el pecho nadie les dice nada, como si ellas por dar biberón pudieran darse "caprichos" y saltarse la dieta, cuando tendrían que comer exactamente lo mismo, por su propia salud.
Ya, pero claro, de lo que la madre coma vivirá el hijo
Que sí, que estoy de acuerdo, que la madre que amamanta tiene que comer sano para que, en definitiva, su hijo también coma sano. Que no es lo mismo alimentarse de comida normal que de comida basura, pero tampoco hace falta pasarse con las recomendaciones en plan exclusivo, como si amamantar fuera algo que te obligara a decir "no" en caso de hacerse una fiesta de cumpleaños, "no" si te ofrecen un helado o "no" si te apetece un refresco.
A los bebés no les pasa nada, por norma general (a menos que el bebé sea alérgico o intolerante a algo que come la madre), por el hecho de que una madre coma exactamente como comía antes de quedarse embarazada. No hace falta que modifique nada. Bueno, miento, nada a menos que antes bebiera alcohol. Es lo único que debe dejar de tomar. De lo demás, puede comer de todo, tranquilamente, igual que lo come una mujer que da biberón. Si es lo recomendable o no, ya no sé... habrá que mirar qué come, y valorar si es lo más sano, de igual modo que cualquier persona debería revisar en algún momento de su vida cuán sana es la dieta que lleva, con el fin de comer mejor.
Un poco exagerado, ¿no?
Puedo parecer un poco exagerado insistiendo en el tema. Es posible... es que son ya tantas las veces que he oído a profesionales recomendar una dieta casi exclusiva a las madres que amamantan, y tantas las madres que se acaban cansando de comer perfectamente bien que al final se plantean dejar la lactancia para volver a comer lo de antes, que toco el tema para que no sea causa de abandonos de la lactancia. Una mujer no tiene que comer bien para que su hijo esté más sano o su leche sea mejor. Una mujer tiene que comer bien porque es lo recomendable para su salud. Ni más, ni menos.
Foto | Andrew Bardwell en Flickr En Bebés y más | ¿Las madres comen adecuadamente durante la lactancia?, Por qué la dieta Dukan es poco recomendable para recuperar el peso tras el parto, Dieta sana, también antes del embarazo, para evitar defectos congénitos en el bebé
