Hace tiempo que ciertos cuentos clásicos son objeto de críticas por parte de educadores y padres, que sostienen que aparte de ser crueles, transmiten valores poco apropiados para los niños.
Recientemente le ha tocado el turno al cuento de "La Bella Durmiente". Una madre inglesa ha denunciado que la historia es inapropiada porque transmite sumisión y debilidad de la mujer, que además culmina con un beso no consentido por parte del hombre.
La denuncia en redes sociales
Sarah Hall tiene un niño de seis años, y el temor a que su hijo reciba un mensaje erróneo cuando escuche o lea el cuento de "La Bella Durmiente" le ha llevado a iniciar una campaña en contra de este clásico infantil.
Por ello, se ha puesto en contacto con el colegio donde estudia su hijo para instar a los responsables del centro a que eliminen el cuento de sus aulas, concretamente la versión de enseñanza de lectura "Oxford Reading Tree"
Paralelamente, Sarah hizo público un mensaje en su cuenta de Twitter bajo el hashtag #MeToo, con el que cientos de miles de personas están denunciando en la Red el abuso y acoso sexual que sufren las mujeres en el mundo.
Tell you what, while we are still seeing narratives like this in school, we are never going to change ingrained attitudes to sexual behaviour #MeToo #consent #mysonissix pic.twitter.com/3g4gyjifi9
— Sarah Hall (@Hallmeister) 19 de noviembre de 2017
"Te diré algo, mientras todavía estamos viendo narrativas como esta en la escuela, nunca vamos a cambiar actitudes arraigadas al comportamiento sexual" - rezaba su mensaje, con el que pretende concienciar a la sociedad.
Su mensaje fue retuiteado y comentado por cientos de personas, y aunque muchos le dieron la razón, también hubo voces contrarias que opinaron que se había llegado a un punto en el que se estaban sacando las cosas de contexto.
I bought a book of 100 fairytales when my daughter was little, read a bunch and promptly threw it in the trash. Women are mostly prizes to be won, property of men or treated as if we are we are sitting around waiting for men...no thanks
— Kate Maxwell (@mrskmax) 27 de noviembre de 2017
"Compré un libro de 100 cuentos clásicos cuando mi hija era pequeña, leí un montón y rápidamente lo arrojé a la basura. Las mujeres son en su mayoría premios para ganar, propiedad de hombres o tratadas como si estuviéramos toda la vida esperando a un hombre ... no gracias"
Your poor daughter. glad I have a mum that lets me believe in fairytales .get some help please
— samantha (@stamy13) 27 de noviembre de 2017
"Pobre hijo. Me alegro de tener una madre que me permita creer en los cuentos de hadas. Consigue algo de ayuda por favor"
It's not the first time that we talk about how bad these stereotypes can be for children. In fact, a lot of people think about it. Society is more concerned about this type of things. Even Disney is changing its 🙅♀️ characters. pic.twitter.com/pePhSDB0WA
— Sílvia (@SivisVila) 30 de noviembre de 2017
"No es la primera vez que hablamos de lo malos que pueden ser estos estereotipos para los niños. De hecho, muchas personas lo piensan. La sociedad está más preocupada por este tipo de cosas. Incluso Disney está cambiando sus personajes"
Have you actually ever read the tale ? It's not about a non-consented kiss, but about an effort to revive a person who would otherwise remain in a coma-like state or worse die. It's comparable to mouth-to-mouth resuscitation. Absolutely ok to teach to assist people in danger !
— Ian McBrayne (@IMcBrayne) 28 de noviembre de 2017
"¿Alguna vez has leído la historia? No se trata de un beso no consentido, sino de un esfuerzo por revivir a una persona que, de lo contrario, permanecería en coma o moriría. Es comparable a la resucitación boca a boca. ¡Absolutamente bien para enseñar a ayudar a las personas en peligro!"
Un cuento que ha sufrido varias modificaciones
Lo cierto es que el clásico que todos conocemos no tiene nada que ver con la versión original escrita por Basile en 1636 y titulada “Sol, Luna y Talía”, en donde la princesa fue violada por el príncipe y se quedó embarazada de gemelos, que fueron quienes la despertaron tras chuparle el dedo y romper el encantamiento.
En 1697, Perrault dulcificó la historia convirtiéndola en "La bella durmiente del bosque", y aunque posteriormente los hermanos Grimm y Walt Disney incluyeron algunas modificaciones, este cuento viene a ser el que todos conocemos hoy en día.
Pero no sólo "La Bella Durmiente" ha sufrido modificaciones con el paso del tiempo, otros cuentos clásicos como "Caperucita Roja" o "Cenicienta" fueron modificando sus versiones hasta hacerlas más infantiles, dulces y apropiadas para los niños.
Hace unos años, un matrimonio y padres de dos niñas, decidieron emprender el proyecto "Érase dos veces" con el que pretendían dar una vuelta a los cuentos clásicos de siempre y eliminar de sus historias el sexismo, la violencia y la desigualdad.
No cabe duda de que los tiempos van cambiando, y los mensajes que se pretendían transmitir a los niños hace varias décadas (e incluso cientos de años), pueden no tener cabida hoy en día. Sin embargo, soy de la opinión de que los niños, como niños que son, ven los cuentos de una forma muy diferente a cómo lo vemos los adultos, o al menos algunos adultos.
Mi hija de tres años es una enamorada del cuento de "La Bella Durmiente" y de la princesa Aurora. Lo leemos casi todas las noches y confieso que jamás me había parado a pensar en las connotaciones tan negativas que según algunos, transmite esta historia.
¿Cómo lo veis vosotros? ¿Estáis a favor, o en contra de eliminar ciertos cuentos clásicos de los colegios y bibliotecas infantiles? Y en concreto, ¿qué os parece el cuento de "La Bella Durmiente"?
Vía Público
En Bebés y Más Cuentos infantiles: ¿educativos o demasiado crueles?, La Bella Durmiente, edición 50 aniversario, La versión original de "La Bella Durmiente" sería poco recomendable para los niños, "Los cuentos de los hermanos Grimm" de Taschen, El cuento original de "La cenicienta" tampoco sería demasiado adecuado para los niños, El cuento de Caperucita Roja ha perdido parte de su significado para hacerse más infantil