Con la llegada de la primavera llega también una 'explosión' de vida entre los animales que acostumbramos a ver en nuestro entorno, especialmente las aves. Los niños adoran observar de cerca a estos animales, comprobar cómo interactúan, se alimentan o incluso cuidan de sus crías.
Por eso, queremos proponemos una excelente actividad para realizar con los niños en esta época del año: elaborar un comedero para pájaros y llenarlo de alimento específico para las aves.
Esta manualidad primaveral tan bonita no solo resulta muy divertida y creativa para los peques, sino que tiene un alto valor educativo, además de ayudar a que las aves urbanas no sufran tanto en determinadas épocas del año para encontrar alimento o agua.
Te contamos paso a paso cómo hacer un práctico comedero o bebedero para pájaros y fomentar en los niños el amor y respeto por la naturaleza.
Materiales que vamos a necesitar para fabricar nuestro comedero de pájaros
Se trata de una manualidad sumamente sencilla para la que no se necesita ningún material especial, por lo que podremos hacerla en cualquier momento con cosas que todos tenemos en casa:
- Una botella de plástico vacía de 1 o 1,5 litros, de agua o refresco (debes limpiarla bien por dentro antes de utilizarla)
- Un cutter para cortar el plástico.
- Un palo largo de madera (los venden en tiendas de manualidades y bazares).
- Silicona o cola para pegar.
- Para decorar la botella podéis utilizar papel charol, cartulina, folios y lápices de colores, goma eva, pegatinas… ¡A vuestra elección!
- Una cuerda, cordón o alambre para colgar la botella.
Cómo construir el comedero para pájaros paso a paso
1) Perforamos la botella con el palo de madera
Lo primero que tenemos que hacer es atravesar la botella por su parte más inferior utilizando un palo de madera. El palo servirá de soporte para que los pajaritos se apoyen mientras comen.
Haremos los agujeros con el cúter muy despacio y con cuidado, para no rajar la botella. Yo me he ayudado también de un pequeño y fino destornillador para agrandar la incisión y no tener dificultades a la hora de introducir el palo.
2) Dibujamos en la botella la abertura del comedero
Con un rotulador dibujaremos en la botella una ventana con forma de semicírculo. A través de esta ventanita, los pájaros meterán la cabeza para coger el alimento.
La abertura debe quedar situada dos o tres centímetros por encima del palo, para que el pájaro pueda acceder fácilmente al contenido mientras está posado. Además, debe ser lo suficientemente ancha como para que pueda meter y sacar la cabeza sin dificultad.
3) Definimos y recortamos la abertura
Una vez dibujada la ventanita, realizaremos una primera incisión en el extremo con ayuda de un cúter y después utilizaremos unas tijeras para terminar de recortar todo el contorno.
4) Colocamos la cuerda para colgar y sellamos el tapón
Con ayuda del cúter y posteriormente del destornillador, haremos un pequeño agujero en el tapón de la botella. A través de esta incisión introduciremos el alambre, cordón o cuerda que nos servirá para colgarla. Al final de la cuerda debemos hacer un nudo o colocar un tope para que no vuelva a salirse.
Una vez metida la cuerda, procederemos a cerrar la botella poniendo en el tapón un poquito de cola o silicona caliente que lo sellará por completo y evitará que se afloje o se abra con el paso del tiempo.
5) Decoramos el comedero a nuestro gusto
Este último paso es la parte más divertida para los peques, pues toca echar a volar la imaginación para decorar el comedero.
Por ejemplo, podemos recortar figuritas en papel charol o cartulina y pegarlas después la botella, o pintar directamente sobre la botella con un rotulador indeleble. La goma eva, el fieltro y las pegatinas también dan mucho juego a la hora de decorar.
También, podemos hacer un tejadillo para dar sombra a los pájaros mientras comen. Para ello utilizaremos un plato desechable de tamaño pequeño, que debemos agujerear por el centro para meterlo a través la parte superior de la botella.
¡Seguro que los niños se les ocurren mil ideas divertidas y coloridas para adornar el comedero!
6) Buscamos un sitio para colgarlo y lo llenamos de comida
Podemos colgar el comedero de las ramas de un árbol, de un porche o tejadillo o de algún soporte de pared. Es preferible situarlo bajo techo, para que si llueve no se estropee la decoración. No obstante, el sol va a acabar haciendo mella en los colores de nuestros dibujos, por lo que es recomendable renovarlos con frecuencia.
Cuando esté listo sólo tenemos que llenar el fondo de la botella de alpiste o comida preparada para aves y esperar pacientemente a que los pajaritos hagan acto de presencia. Si no tenemos comida para pájaros, también podemos llenar nuestro comedero de agua para que las aves se refresquen en esta época calurosa.
¿Qué aprenden los niños con esta actividad?
Además de los beneficios propios que tiene para los niños hacer manualidades (desarrollan/entrenan destrezas motoras, creatividad, imaginación, coordinación óculo manual, uso de tijeras...), elaborar un comedero para pájaros les permitirá observar de cerca a las aves y aprender de ellas, interiorizando el ciclo de vida natural y la importancia de cuidar y respetar a los animales.
Asimismo, y dado que la llegada de los pajaritos al comedero llevará tiempo, los niños deberán poner a prueba su paciencia, atención y capacidad de observación para no perderse detalle.
Foto de portada | Bebés y Más