En las últimas horas ha salido a la luz un vídeo en el que el Dalai Lama, Tenzin Gyatso, pedía a un niño que le besara en la boca y después le chupara la lengua durante un acto público en el norte de India.
Las críticas a tan lamentable suceso no se han hecho esperar, además de avivar el debate en redes sociales sobre la importancia de educar a los niños desde pequeños para que sepan poner límites sobre su cuerpo y no obligarlos a besar a otras personas, sean quienes sean.
El Dalai Lama se ha disculpado: "A menudo, su santidad gasta bromas inocentes a las personas que conoce"
Tal ha sido la controversia que han causado las imágenes que la oficina del Dalai Lama se ha visto obligada a emitir un comunicado en nombre del líder tibetano en donde pide perdón públicamente:
— Dalai Lama (@DalaiLama) April 10, 2023
“Ha estado circulando un vídeo sobre un encuentro reciente en el que un niño le pregunta a Su Santidad, el Dalai Lama, si puede darle un abrazo. Su Santidad desea pedir disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos en todo el mundo por el daño que sus palabras hayan podido causar. Su Santidad a menudo bromea con las personas que conoce de forma inocente y traviesa, incluso en público y ante las cámaras. Lamenta el incidente"
A pesar de estas palabras, la mayoría de internautas considera que las disculpas del Dalai Lama no son suficientes y piden mano dura para proteger a los niños frente a este tipo de situaciones, que en ningún caso deberían considerarse "bromas".
También se ha criticado duramente que ninguno de los presentes dijera o hiciera algo al respecto, sino todo lo contrario; todos parecen reír y aplaudir el gesto del líder espiritual.
Me parece gravísimo. Se necesita investigar estas situaciones.
— Cecilia Núñez (@cecilia_nunezc) April 10, 2023
No tengo palabras...disculpas?? 😳
— Laura (@laura_an__) April 10, 2023
Las disculpas no sirven !!!
— Lilly (@lelc) April 10, 2023
Cometió un abuso contra el menor a vista y paciencia de todos 😡
Debería ser juzgado y los que miraban tb por cómplices !!!
Esto es vergonzoso y más aberrante es que la gente se ría
— inx (@inxgomu) April 10, 2023
La disculpa es un comunicado donde dice que al Dalai Lama lo malinterpretaron porque es "inocente y juguetón", así que de disculpa nada.
— Sarita Salazar (@sarasalazar) April 10, 2023
Y sólo porque ahora hasta una plancha trae cámara, pero ¿cuántos años lleva este escudado en su aura "moral" haciendo de las suyas?
Que hagan una investigación y lo metan en la cárcel si ha cometido más abusos. Y por lo del otro día mínimo q lo destituyan del cargo. Qué ilusa soy 😒 eso es lo q vale un niño y mientras la sociedad riendo y aplaudiendo a un puto baboso
— Yolanda (@crosslifemoon) April 11, 2023
Cabe mencionar que los budistas tibetanos se sacan la lengua como parte de su cultura. Es un gesto de respeto, un saludo y una forma de mostrar acuerdo, tal y como se explica en este artículo de Los Ángeles Times. Pero las razones culturales (ni ninguna otra excusa) deberían justificar jamás este tipo de acciones con los niños.
Es aberrante y para mi,es pederastia.
— Raquel (@raquelstrr) April 10, 2023
Los y las niñas NO se tocan.
Yo no puedo justificar nada tan repugnante bajo el paraguas de lo cultural.
Ni cultura tibetana ni disculpas ni naaa...éste tío no representa para nada las enseñanzas de Buda, que no es una religión por cierto!🙏💕
— juan segura mullor (@puggala) April 10, 2023
Tolerancia cero con la pederastia o cualquier tipo de abusos sexuales.
— Alea Jacta Est (🏠) (@Alea_J_Est) April 10, 2023
Cómo enseñar a los niños a no dar besos que les hagan sentir incómodos
Aunque obviamente, la responsabilidad jamás es del niño, dado que triste y alarmantemente este tipo de situaciones son frecuentes (muchas veces incluso se dan en el entorno más cercano al niño), es fundamental que los padres enseñemos a nuestros hijos desde muy pequeños a poner límites firmes sobre su cuerpo para evitar situaciones que les hagan sentir incómodos.
Pero, ¿cómo podemos hacerlo?
Respeta a tu hijo si no quiere dar besos, aunque se trate de los abuelos, los tíos o el amigo de la familia al que lleváis tiempo sin ver. Jamás debemos obligar a los niños a besar a otras personas; primero, porque los besos no se piden ni se chantajean, sino que se regalan de forma voluntaria, y segundo porque dar besos es una decisión personal, y como tal debe ser respetada. En cambio, sí podemos enseñarles a saludar cortésmente de un modo que les haga sentir cómodos.
Evita situaciones que pueden incomodar al niño. Al margen de los besos, a veces los padres caemos en el error de forzar situaciones que resultan estresantes e incómodas para los niños, aunque para nosotros suponga un gesto inocente.
Por ejemplo, cuando les obligamos a sentarse en el regazo de gente que no conocen o a ser sostenidos en brazos de otras personas; cuando por pequeños que sean, les cambiamos de ropa delante de otros, sin respetar su pudor ni derecho a la intimidad; cuando hablamos sobre su cuerpo con otras personas; cuando no cuidamos lo que publicamos sobre ellos en redes sociales...
Enseñarles que su cuerpo es suyo, y de nadie más. Debemos enseñar a los niños que su cuerpo les pertenece y que nadie puede tocarles sin su permiso o 'robarles' un beso, incluso cuando se trata de una persona a la que quieren.
'No. Esto no me gusta'. Es fundamental enseñar a los niños desde pequeños a poner sus propios límites y ser asertivos, para que sean capaces de expresar libremente y sin temor aquello que no les gusta. Esto también incluye poner límites sobre su propio cuerpo.
Pero para enseñar a poner límites es crucial que los padres seamos respetuosos a la hora de criar a nuestros hijos, escuchemos y respetemos sus opiniones, valoremos su iniciativa y toma de decisiones, y no tratemos de imponer siempre nuestro criterio. De lo contrario estaremos fomentando la sumisión.
Ni secretos ni bromas. Los secretos son una de las tácticas que utilizan las personas que cometen abusos sexuales. Por este motivo es importante enseñar a los niños la diferencia entre los secretos buenos y malos, siendo estos últimos aquellos que les ponen tristes, les hacen sentir incómodos o les generan malestar. Igualmente, ninguna conducta que haga sentir mal a otra persona debería justificarse bajo el paraguas de las "bromas". Hablamos de broma únicamente cuando todas las partes implicadas se ríen y pasan un buen rato. De lo contrario, se trata de un abuso.
Por último, recordemos que la mejor prevención que podemos hacer los padres es vigilar el entorno de nuestros hijos, informarles sobre el tema dándoles unas pautas acordes a su edad, y confiar plenamente en ellos y en su palabra, así como hacerles ver que ellos también pueden confiar en nosotros siempre que lo necesiten.