Una de las cosas que más irritan a los papás cuando salen de casa, y con razón, es que los baños públicos masculinos no cuenten con sitios decentes para cambiar al bebé. Como si ellos no cambiaran pañales.
Cada vez más ciudades reconocen la igualdad en el cuidado del bebé y se suman a la obligación de contar con ellos. Ahora será Galicia la primera comunidad autónoma que obligará a instalar cambiadores para bebés en los baños públicos de hombres.
En los nuevos edificios
La medida se enmarca dentro de la futura Lei de Impulso Demográfico que coordina la Consellería de Política Social impulsada por la Xunta (se prevé que se apruebe antes de acabar la legislatura), que exige que todos todos los edificios y establecimientos de uso público de nueva construcción cuenten con cambiadores accesibles también para los papás.
Se instalarán en espacios "para actividades de carácter social, recreativo, deportivo, cultural, educativo, comercial, administrativo, asistencial, residencial, sanitario u otras análogas", y hay dos exigencias concretas.
Si el nuevo espacio es de propiedad pública, deberá contar con sala de lactancia que incluya cambiador para bebé, mientras que en los espacios ya existentes, deberán hacerse reformas para adecuarlas a la nueva realidad.
En los establecimientos de próxima construcción de propiedad privada, como restaurantes, centros comerciales o deportivos y cualquier tipo de residencia, estarán obligados a colocar los cambiadores accesibles tanto para hombres como para mujeres.
Ya no valdrá, como es ahora práctica habitual, que estén instalados en el baño de mujeres. Si es así, también habrá que colocarlos en los aseos de los hombres. La alternativa sería, si se dispone de un tercer baño dedicado a personas con alguna discapacidad, instalarlo en este cuarto de uso mixto.
También parking para familias
La ley también contempla que los espacios de nueva construcción deberán habilitar en el parking plazas especialmente adaptadas y reservadas para las familias con hijos menores de doce años de edad. Algo que agradecerán las familias, ya que a veces se hace muy complicado aparcar y bajar y subir al coche con niños pequeños.
Estas plazas serán más amplias y se ubicarán cerca de los accesos a las zonas comunes, pero no se podrán hacer a costa de las dedicadas a conductores con minusvalía. Al igual que con los cambiadores de bebés, en los sitios ya existentes, la Xunta impulsará las reformas necesarias para adaptarlos a las nuevas directivas.
Vía | Faro de Vigo