Mark Zuckerberg ha publicado en su perfil de Instagram recientemente una foto de su familia felicitando el 4 de julio en Estados Unidos. Esta no sería una noticia de no ser porque ha censurado el rostro de sus hijas Maxima y August (el de Aruelia no lo está), y esto ha causado revuelo en el mundo entero: mientras para unos se trata de un acto de hipocresía teniendo en cuenta que sus empresas se basan en publicar y comerciar con datos personales de todo el mundo, otros los vemos como un mensaje sobre la seguridad de los niños en las redes sociales.
Este es un mensaje muy poderoso y va mucho más allá de la seguridad que necesitan por ser hijos de quien son: si tú eres el dueño de Instagram y tienes el poder para rastrear, vigilar y borrar todo lo que sucede con lo que se publica allí y aún así ocultas las caras de los niños, quiere decir que tu poder es limitado y las fronteras no las delimita Instagram. Esas imágenes pueden tener un destino que nadie conoce gracias a la entrada de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial y no puedes hacer nada para evitarlo, salvo salvaguardar su imagen.
Está claro que la seguridad de esos niños pasa por tratar de mantener su aspecto en el anonimato, pero esta cuestión es extrapolable a cualquier otro. A los acosadores no les importas si tú tienes dinero o no, si eres famoso o no, o tienes miles de seguidores o no: la "presa" es el niño. Si tú como padre lo expones de forma pública, solo estás facilitando que su imagen pueda terminar en las manos equivocadas.
La privacidad de los niños en las redes sociales es un tema prioritario
Parece que durante los últimos meses el tema de la privacidad de los niños en las redes sociales se está agitando gracias a medidas como las que se han propuesto en Francia, en donde un proyecto de ley busca prohibir que los padres publiquen y compartan fotografías de sus hijos en Internet.
El tema es tan importante, más aún con la oleada de influencers que basan su contenido en sus propios hijos (también conocidas como "instamamis"), poniendo en bandeja de plata toda la su información, con lo cual acceder a ellos es sumamente sencillo. Sin duda requiere un debate profundo y medidas urgentes para proteger a los más vunerables, que en este caso son los menores.
De momento, nosotros nos quedamos con lo que representan las caras tapadas de las hijas de Mark Zuckerberg y uno de los comentarios más populares de la publicación: "Incluso Zuck no confía en sus plataformas para exponer la cara a sus hijos".