Desde que la familia real británica anunció en septiembre el tercer embarazo de Kate Middleton y que el bebé nacería en abril, todas las miradas están puestas sobre la Duquesa de Cambridge. El nacimiento puede darse "de un momento a otro", según palabras del propio príncipe Guillermo. Puede ser cuestión de días.
Aunque ya no hacía apariciones en público debido a que oficialmente ya disfruta de su permiso de maternidad, el domingo pasado se la pudo ver en la misa de Pascua junto al resto de la familia. La redondez de su rostro anuncia la proximidad del día, como dirían las abuelas, ya tiene "cara de parto". Y ya está todo listo para la llegada del bebé real.
Todo preparado para el parto
Ya está todo dispuesto para el nacimiento, y nada queda librado al azar. Kate no quiere inducciones ni partos programados, así que el parto sucederá cuando el bebé decida nacer.
Aunque circularon rumores sobre un posible parto en casa (o mejor dicho, en palacio), y por supuesto la duquesa no se pronunció al respecto, el sitio donde nacerá el próximo bebé real es una incógnita.
Lo más probable es nazca en el hospital Saint Mary de Londres, el mismo centro donde nacieron sus dos hijos, los príncipes George y Charlotte, y donde la princesa Diana tuvo a Guillermo y Harry.
Se ha podido saber que la familia tiene reservada una sala de partos privada en el ala Lindo del hospital, que la suite cuesta seis mil euros las primeras 24 horas si el bebé nace naturalmente, y siete mil setecientos si nace por cesárea.
En cuanto al equipo médico, Kate será atendida por su ginecólogo, Alan Farthing, de 54 años, que ha retrasado su jubilación para atender a la duquesa. Tendrá a su disposición una veintena de enfermeras y médicos, así como anestesistas y especialistas en cuidados postnatales.
Se espera que, como en las dos anteriores ocasiones, el parto sea natural.
Las apuestas de los británicos
Todo lo que ronda a la familia real británica causa gran revuelo entre los británicos, y el nacimiento del tercer retoño de Kate y William no es la excepción. Los ingleses hacen apuestas por la fecha de nacimiento, el sexo y el nombre bebé.
Fecha de nacimiento: Según el Daily Mail, la fecha en la que vendrá al mundo es el 23 de abril, día de San Jorge, patrón de Inglaterra. A lo mejor el bebé tiene ya viene con sentimiento patriótico de serie y se cumplen las predicciones.
Sexo del bebé: según las apuestas, será una niña.
¿Cómo se llamará el bebé de Kate y William?
Por supuesto, también apuestan por el nombre que barajan los duques, una de las apuestas más jugosas:
Si es niña: ganan los nombres Mary, Alice. Elizabeth, Victoria. También se especula con que podrían llamarla Diana, como la madre del príncipe.
Si es niño: los nombres favoritos son Albert, Arthur o James, según la casa William Hill, y Edward, Arthur o Henry son los tres nombres candidatos según las apuestas de Betfair.
Para que os hagáis una idea de la obsesión de los británicos con la familia real y su afición a las apuestas, ya han empezado a apostar por el futuro bebé de Harry y Meghan Markle, incluso antes de casarse.
Cómo se anunciará el nacimiento
Después de que la familia real reciba la noticia del nacimiento, el equipo de prensa de la casa real informará a los medios sobre el sexo, el peso y el momento del nacimiento.
Las cuentas de Twitter e Instagram del Palacio Real también publicarán sobre el nacimiento. Eso sucederá antes de que se exponga el documento oficial con el anuncio del nacimiento en un caballete que quedará expuesto en las puertas del Palacio de Buckingham. El anuncio quedará expuesto durante 24 horas, según se viene haciendo desde 1837 con todo los nacimientos de la casa real.
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