En cuanto he visto este post de Liliana en Directo al Paladar, no me he podido resistir a compartir la idea (que es estupenda) con vosotros. Además era hoy o nunca, porque mañana no tendríais tiempo de comprar los materiales necesarios.
Se trata de disfrazar los Chupa Chups de fantasmas y esqueletos para sorprender a los amiguitos, y no os va a llevar más que un par de horas, en las que estaréis la mar de entretenidos mientras vuestros hijos se divierten ayudando, y puede que hasta retrasen un poco el trabajo (para que negarlo), si deciden utilizar las plantillas que iréis cortando para vestir a sus muñecos. En cualquier caso será muy divertido.
¿Qué necesitamos?
- Papel de seda negro y blanco, cartulina negra y blanca, tijeras, celo, rotulador permanente negro, rotulador blanco.
¿Cómo se hace?
Si vais a vestir a más de 10 caramelos, os conviene tener cortadas varias láminas de papel de seda, así que procurad superponerlas en forma de cuadrado (10 cm. de lado), y recortar las esquinas para que queden redondeadas, así haréis varias de una vez. Serán la base del “disfraz”, con la que envolveréis el caramelo, sujetando con celo al palo.
Después imprimís las plantillas aquí, y las utilizáis para conseguir modelos iguales en cartulina. Por colores corresponde el negro al esqueleto, y el blanco al fantasma; tienen dos orificios que se sujetan al palo del Chupa Chups. Ahora solo nos queda pintar los detalles con rotulador o pincel fino y pintura acrílica.
¿A que quedan muy chulos? Entre estos monstruo caramelos, y las arañas de patas peludas, os vais a lucir con los invitados.
Vía | Directo al Paladar En Peques y Más | Nuestras cestitas para recoger dulces en Halloween