Seguro que ya habéis abierto los regalos de Reyes, y ahora tenéis todo el día para probarlos y disfrutarlos, después habrá que esperar otros cuatro días laborales hasta el sábado en la que volveremos a tener tiempo libre. ¿Sabéis? el mejor regalo para nuestros hijos es el tiempo que les dedicamos, y eso incluso con las que ya son más grandes, los beneficios de nuestra presencia y compañía, perduran más allá de las habilidades que adquirirán con la nueva bicicleta o la oportunidad de probar por fin ese juego para la video consola que tanto anhelaban.
Habíamos leído que en general los niños iban a pedir más tabletas que juguetes, pero los padres también pedimos cosas ¿no? Dale Tiempo al Juego nos cuenta que después de haber preguntado a sus seguidores en Facebook, han descubierto que las mamás y los papás habían llenado sus cartas de juego e ilusiones.
De hecho la petición estrella ha sido ‘más tiempo para jugar con los hijos’, aunque le va a la zaga en popularidad ‘conservar o conseguir el trabajo’
Secundariamente (aunque no por ello menos importantes), los adultos que son padres también desean a veces dormir de un tirón, o alguna hora extra para sus días… Pero volvamos al principal deseo: incluso cuando tenemos poco tiempo, o cuando deseamos acostarlos para descansar nosotros, o cuando dudamos entre poner la lavadora o congelar los restos de la cena para que no se estropeen, sería conveniente priorizar la atención a los niños.
No siempre es cuestión de preparar una actividad complicada, a veces basta con unas cosquillas, la lectura de dos páginas de su cuento preferido, una partida a la Oca, o simplemente dejar que nos cuenten en voz bajita cómo les ha ido el día. Pero eso sí, siempre que tengamos más tiempo saldremos en bicicleta con ellos, les invitaremos a preparar unas galletas juntos o nos atreveremos a coger el mando de la consola para echar una partida.
Porque son ellos los que no pueden esperar, ya que cada día son más grandes y esto es imparable, cuando pasen los años tendremos todo el tiempo del mundo para ordenar papeles, limpiar los cristales o ir a cenar mientras los dejamos con la abuela (son solo ejemplos). Ahora es su momento, y en consecuencia nuestro momento, os invito a que no os lo perdáis.
Y volviendo a paquetes, regalos e ilusiones materializadas, desde Dale Tiempo al Juego nos recuerdan que ‘el juego y el juguete deben estar presentes en la vida del niño a lo largo de todo el año y durante su crecimiento.
Los juguetes participan en su educación y desarrollo. Mediante el juego aprenden acerca del mundo que los rodea, conocen las primeras normas, aprenden a compartir, conocen nuevos amigos, practican actividad física y fomentan su creatividad e imaginación’.
Disfrutad de los juguetes, y sobre todo de las compañía de vuestros hijos
Imagen | gillian maniscalco Vía | Dale Tiempo al Juego En Peques y Más | Los padres tienen poco tiempo para jugar con sus hijos, aunque les gustaría incrementarlo