¿Qué harías si llevas a tu hijo a un casting y te dicen que lo dejarán un día sin comer o que si se pone muy agresivo le darán descargas eléctricas? No darías crédito de lo que oyes, ¿verdad? Te indignarías, y sin esperar un segundo te llevarías a tu hijo de allí enseguida.
Pues 'El Casting más bestia' es la campaña que ha puesto en marcha la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA) para denunciar el maltrato que sufren los animales en la industria publicitaria. El mensaje que quieren transmitir es, si no lo harías con tus hijos, no lo permitas con los animales.
Vale que comparar a un niño con un animal puede resultar algo fuerte, pero me parece una manera genial de concienciar sobre el abuso que sufren los animales que son utilizados para hacer rodajes o exhibiciones.
¿Cómo sale ese tigre tan calmado en cámara? ¿Cómo han hecho para que ese mono aprenda a bailar? Entre las prácticas que denuncian está la de sedarlos, limarles y cortarles los colmillos, mantenerlos encerrados durante días y limitar las raciones de comida para luego ser usadas como incentivos.
Sin duda, los niños son siempre un buen reclamo para crear impacto publicitario, pero ¿está bien compararlos con animales?.
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