Hacer feliz a un niño enfermo es más fácil de lo que podríamos creer a priori, porque además de los cuidados médicos necesarios, sólo necesitan el cariño de todos los que les rodean, y recibir esperanzas de recuperación. Basta recordar esta niña con cáncer que deseaba más que nada comer pizza (y el menú del hospital no la incluía).
Más rotundamente se puede afirmar que a los peques, cuando sienten empatía por sus iguales, la solidaridad les sale por los poros: ¿recordáis cómo Vincent se rapó para que su amigo Zac no se sintiera tan diferente?
Pero vamos ya con el tema que nos ocupa, y con la posibilidad que nos brinda Pekelucas de hacer felices a niñas enfermos (cáncer, alopecia, tricolitomanía), a las que a causa del propio proceso o de los tratamientos, se les ha caído el pelo. Os preguntareis ¿qué es Pekelucas? Se trata de una iniciativa de una empresa del sector de la postrimería (Free Style), tienen una misión muy clara: fabricar pelucas infantiles para niñas de entre cinco y 14 años que han perdido el cabello. Y destinarlas sin coste alguno a cubrir esta necesidad que presentan muchas familias.
Veréis, la iniciativa funciona así: si queréis colaborar podéis ir a que os corten el pelo (mínimo 20 centímetros) a cualquiera de las peluquerías y salones de belleza asociados a Pekelucas, indicando que lo queréis donar. También las propietarias, o los propietarios de salones de peluquería pueden adherirse a la red de colaboradores. Y cualquiera puede colaborar económicamente en la medida de sus posibilidades, para ello es posible ‘apadrinar’ una pekeluca mediante el botón de Paypal. Aunque todavía hay una forma más de contribuir, porque si tenéis pelo en casa se puede mandar por correo.
En FreeStyle (Madrid) el corte es gratis, pero os aviso de que no es oportunidad para cambiar de look sin coste, sino un compromiso
En la web de referencia, os dan todas las indicaciones necesarias para que ayudar no resulte una complicación, y hasta os permiten seguir directamente el estado de vuestra donación. Como veis hay varias formas de colaborar con esta iniciativa tan bonita, además las niñas receptoras se comprometen a donar la peluca a otras que también lo necesiten, una vez que recuperan su pelo.
Deciros que cualquier colaboración para que este proyecto se mantenga en el tiempo es necesaria, porque a las familias receptoras no les cuenta un céntimo, pero existen gastos relacionados con el tratamiento del cabello, hasta que se convierte en una peluca apta para las niñas que lo necesiten. Así que ¿nos comprometemos a ayudar?
Gracias @NuriaOvejero por la información, y gracias también por tu sensibilidad hacia los temas relacionados con la protección de la infancia.
Vía | Ahorro Diario Más información | Pekelucas En Peques y Más | Noah el niño que ha superado el cáncer: mi vida es la prueba, La aplicación Pain Squad (Patrullero del dolor) para ayudar a los niños con cáncer