Ya en febrero os mostramos el vídeo de un bebé que acababa de nacer sin tener muy claro que ya había nacido, y estos días se está haciendo viral la historia de otro bebé que también nació dentro de su bolsa y se mueve sin, al parecer, saber que ya está aquí.
El cordón seguía latiendo
El parto sucedió en el hospital Santa Casa de Misericórdia de Barretos, Brasil, y fue compartido en Facebook por Gih Flor de Lis. Mucha gente al ver el vídeo duda de que sea positivo que nadie haga nada para que pueda respirar, pero olvidan lo más obvio: después de nacer, el cordón umbilical del bebé sigue latiendo y, por lo tanto, sigue recibiendo oxígeno y nutrientes por este medio durante unos minutos más (de hecho, se aconseja que se permita al cordón seguir latiendo unos minutos por el bien del bebé).
Un parto velado
Este tipo de nacimientos se conocen como partos velados o partos enmantillados y no son muy habituales porque la bolsa suele romperse antes de que el bebé nazca (cuando se rompen aguas). Precisamente, por no suceder a menudo, se dice que los niños que nacen de esta manera son especiales y gozan de buena suerte toda la vida.
Esto, claro, no es más que una interpretación de la gente ante un suceso poco común, así que la suerte, en este caso, es más por haber nacido sin apenas darse cuenta y, en nuestro caso, por la curiosidad de poder ver cómo está un bebé dentro del útero, pero en el exterior.
Vídeo | Assessoria Mamãe - Instituto
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