Esta imagen me ha parecido preciosa y he querido compartirla con vosotros, porque demuestra que no es lo mismo tener hijos que ser padre. Es admirable el caso de este padre comprometido que alimenta a su bebé con leche de la madre mediante un suplementador fabricado en casa.
No he podido saber por qué, pero por alguna razón, o porque el pequeño rechaza el pecho, la madre no puede amamantar al recién nacido y es el padre quien ha decidido utilizar esta técnica para alimentarlo.
A juzgar por el tamaño, parece ser un bebé prematuro, y han elegido descartar el uso del biberón en un bebé tan pequeño para evitar el síndrome de confusión tetina-pezón, por temor a que cuando la madre pueda, el niño no quiera coger el pezón por haberse acostumbrado a la tetina del biberón.
Si bien es un hecho extraordinario que el hombre pueda llegar producir leche humana, y la cantidad puede ser escasa dependiendo de los niveles de prolactina que segregue, si la madre es capaz de producir leche, lo ideal es que el bebé se alimente con su leche.
El suplementador es un buena forma de que el bebé consiga su propio mecanismo de succión. Si os preguntáis cómo fabricar un relactador o un suplementador no es difícil. Se necesita un vasito y una sonda nasogástrica finita, de las usadas para recién nacidos.
El padre introduce el dedo en la boca del bebé para que éste se acostumbre a abrir la boca para recibir el alimento, una técnica que también se utiliza con el método jeringa-dedo, que es muy parecida a la que vemos aquí y consiste en colocar la leche en la jeringa y al apretar el émbolo hacer que la leche vaya fluyendo por el dedo hasta la boca del bebé.
Lo cierto es que la imagen de este padre comprometido de tal manera en el cuidado de su bebé, me conmovió profundamente. Debiera ser lo normal, y me parece admirable.
Vía | Vía Láctea En Bebés y más | Cuando el bebé rechaza el pecho (I), (II) y (III)