Mejorar la salud de los más pequeños es fundamental, esta es una de las razones primordiales por las que investigadores norteamericanos han centrado sus estudios en las variaciones genéticas que se encuentran relacionadas con los partos prematuros y la relación existente entre la exposición a la luz y la salud en los bebés prematuros. El reloj biológico de un bebé prematuro puede verse alterado por los factores externos como la luz, provocando algunas pequeñas alteraciones en el comportamiento o el desarrollo y que estos investigadores estudian para una mejor comprensión de todo lo que rodea el mundo del bebé prematuro.
Hoy en día, el factor genético, su conocimiento y su manipulación es vital para conseguir embarazos con menor riesgo de parto prematuro y una adecuada prevención para distintas enfermedades, de hecho todos hemos podido conocer noticias que nos hablan de cómo gracias al conocimiento genético se ha conseguido que nazcan bebés libres de determinadas enfermedades hereditarias, se ha logrado minimizar la incidencia de otras enfermedades e incluso se han curado. Entender la variación genética es fundamental, descubrir y determinar el por qué se produce un nacimiento prematuro en algunas mujeres que, según los estudios actuales no deberían presentar problema alguno por la ausencia de factores de riesgo, es una de las tareas de estos médicos norteamericanos.
Esto conduce a una deducción lógica, quizás no existen factores de riesgo porque aún no son conocidos, por tanto es difícil dictaminar la ausencia de éstos si no se conoce a fondo la información genética, pues juega un papel fundamental y es una de las claves para que en un futuro se pueda garantizar la salud y el bienestar tanto de las madres como de los bebés.
Cada descubrimiento realizado puede mejorar la calidad de vida y garantizar un mejor desarrollo en los bebés, la ciencia es una gran aliada de la salud.
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