Cuatro ya está anunciando la vuelta a las pantallas españolas del programa Supernanny.
Es la cuarta temporada de este programa “coach” para padres. Así es como llaman a este tipo de programas en los que se pretende enseñar a la audiencia a comer, ahorrar, e incluso a educar a los hijos a través de las experiencias de otros.
Al igual que en años anteriores, la psicóloga infantil Rocío Ramos-Paúl en el papel de Supernanny acudirá a una casa de familia para observar el comportamiento de sus miembros y a partir de ahí tomar las medidas que crea necesarias para corregir determinadas actitudes.
En años anteriores el programa ha tenido un gran éxito de audiencia aprovechando la desesperación de muchos padres a la hora de poner límites a sus hijos, especialmente a niños rebeldes.
Las premisas de Supernanny son “normas, hábitos y rutinas y tiempo de calidad”, las tres muy necesarias para la educación de los hijos, sin embargo algunos de los métodos que utiliza para llevarlas a cabo no son, a mi parecer, del todo adecuadas para los niños.
Aunque hay cosas en la que coincido como elogiar al niño cuando hace algo correcto, hay otras que no comparto como usar “la silla de pensar”, implementar la técnica de “la no-atención” o el “refurezo positivo”.
Ahora que vuelve Supernanny, a través de las experiencias de otros los padres encontrarán pautas para aplicar (o no) con sus propios hijos.
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