La comunicación con nuestros hijos es la base de una crianza positiva, que nos permite conocerlos mejor, hacerlos reflexionar y generar conversaciones que nos enriquezcan tanto a los niños como a los padres.
Es lo que pretende la Rebeca Rolland, psicóloga especialista en patologías del lenguaje en el departamento de Neurología del Hospital Infantil de Boston, y también profesora de Harvard, y madre de dos niños, a través de su libro 'El arte de hablar con niños' (Ed. Planeta), en el que ofrece a los padres "claves simples para fomentar la bondad, la creatividad y la confianza en los niños".
Cree en la importancia de criar a niños que practiquen la resiliencia, y sostiene que nuestras conversaciones diarias con ellos pueden ayudar significativamente gracias a estas claves, que ha dado a Bebés y más a través de una entrevista por correo electrónico.
El arte de hablar con niños: Claves sencillas para fomentar su autonomía, creatividad y confianza (Familia y crianza)
Cómo tener mejores conversaciones con nuestros hijos
¿Qué es una conversación fértil y por qué es importante fomentarla en los niños?
En una conversación fértil, vamos más allá de la "logística" o la "programación" (por ejemplo, a qué hora es la práctica de fútbol o dónde ponemos los zapatos) y nos enfocamos en ideas y preguntas que son significativas para nuestros hijos y para nosotros.
Ayudamos a los niños a expresar sus sentimientos y comprender los sentimientos de los demás. Los apoyamos para que sueñen con posibilidades, imaginen el pasado y el futuro, y hablen consigo mismos y con los demás de manera alentadora.
Estas conversaciones fértiles tienen una doble promesa. La primera promesa es que mejoran nuestras relaciones en el momento. Nos sentimos más conectados y unidos. La segunda promesa es que estos pequeños momentos se acumulan y nutren la confianza, la creatividad, la comprensión y la empatía de los niños con el tiempo.
¿Por qué es tan importante la curiosidad en la infancia?
Los niños son curiosos por naturaleza, pero muy a menudo, al ayudarlos a crecer, sin querer reprimimos su curiosidad. Decimos "Ahora no" o "No tenemos tiempo para eso" o incluso "Deja de soñar despierto".
Si bien los niños necesitan aprender a prestar atención en la escuela, es igual de importante que los animemos a buscar preguntas e ideas que les interesen. Esto les permite convertirse en aprendices de por vida, con ganas de hacer y buscar preguntas profundas a lo largo de sus vidas.
Necesitarán estas habilidades en su trabajo futuro, como creadores, inventores y solucionadores de los complejos desafíos que enfrentan como sociedad. Pero lo que es más importante, necesitan estas habilidades para mantenerse verdaderamente despiertos como seres humanos en nuestra era tecnológica.
En tu libro mencionas que en las conversaciones no solo es importante hablar, sino también escuchar. ¿Cómo debemos escuchar a los niños?
A menudo pensamos en "escuchar" como una actividad pasiva, pero en realidad, para escuchar a los niños, debemos estar activamente presentes con ellos, haciendo espacio y ofreciendo apoyo para que crezcan sus ideas.
Debemos ofrecerles indicaciones y preguntas abiertas, como "Me gustaría saber más sobre lo que quisiste decir allí" o "¿Cómo se te ocurrió esa idea?" Hablo de 'esperar con curiosidad', sentarnos en silencio con los niños y verlos hacer una actividad, luego hacerles preguntas abiertas basadas en lo que notamos. Por ejemplo, "¿Qué parte de la construcción de esa torre disfrutó más y por qué?"
¿Podrías dar a los padres cinco claves básicas para tener una buena conversación con los niños?
- Enseña y modela habilidades de escucha a los niños; no asumas que entienden cómo "suena" escuchar.
- Empatiza con las emociones más duras de los niños (tristeza, ira). Intenta imaginar lo que se siente ser un niño en esa situación.
- Sea adaptable: tenga conversaciones cuando vea que su hijo está más abierto a ellas.
- Equilibra tu charla y la charla de un niño; intente asegurarse de que ambos tengan la oportunidad de comunicar sus ideas.
- Inicie conversaciones con lo que está en la mente de su hijo, ya sea positivo, negativo o neutral. Esto le muestra a su hijo que se preocupa por lo que le interesa.